El presidente Correa recorrió ayer las instalaciones de la multinacional Hyundai Heavy Industries, que ocupa cuatro kilómetros de costa, en la ciudad coreana Ulan.
El presidente Rafael Correa visitó ayer las instalaciones de Hyundai Heavy Industries, el mayor astillero del mundo, y la refinería de SK Energy, para observar ejemplos del desarrollo surcoreano aplicables a Ecuador.
El mandatario, que cumple su segundo día de visita, dedicó gran parte del tiempo a recorrer estos dos grandes centros industriales y mañana participará en un seminario de inversiones en la capital surcoreana.
En las gigantescas instalaciones de Hyundai Heavy Industries en la ciudad de Ulsan, que ocupan cuatro kilómetros de costa, fue recibido por el presidente de la multinacional, Min Keh-sik, y, tras una charla con directivos, realizó un recorrido por las divisiones de astilleros y plantas industriales.
Un portavoz de la compañía dijo que sus negocios en América Latina están centrados en la exportación de estaciones eléctricas de bajo coste y facilidad de instalación.
En agosto, Ecuador firmó un contrato por 100 millones de dólares para instalar esas infraestructuras en las ciudades de Santa Elena y Quevedo.
El jefe de Estado manifestó su interés por las grandes dimensiones y la tecnología que posee la compañía surcoreana en sus astilleros, de donde salieron el pasado año 102 grandes navíos por valor de 9.300 millones de dólares.
Posteriormente, Correa, quien visita Corea en compañía de nueve ministros, recorrió el complejo petroquímico de SK Energy, la mayor refinería de Corea del Sur y segunda a nivel mundial, donde procesan unos 840.000 barriles de crudo diarios.
Según la compañía, el objetivo de la visita era observar las instalaciones construidas por su filial, la constructora SK E&C, que pretende participar en la construcción de la Refinería del Pacífico en Ecuador.
Esta nueva refinería prevé procesar unos 300.000 barriles diarios de crudo, para convertirse en un proveedor de carburantes y otros productos petroquímicos para países latinoamericanos y del Sudeste asiático. El proyecto está dotado de un presupuesto de 12.500 millones de dólares y se espera que comience a funcionar en diciembre de 2013.
El mandatario ecuatoriano lamentó que Ecuador tenga que importar combustibles pese a ser un productor de crudo, mientras empresas como SK Energy han conseguido exportar el 60% de su producción, pese a que Corea del Sur es dependiente del crudo extranjero en un ciento por ciento.
La firma SK E&C ganó en marzo la licitación para hacer el diseño básico de la Refinería del Pacífico con un presupuesto de 260 millones de dólares.
El sector industrial de este país asiático espera que la visita del presidente ecuatoriano a Corea del Sur impulse las inversiones surcoreanas en el sector energético en Ecuador, quinto productor de petróleo de América Latina.