El Gobierno de Ecuador recibirá mañana, de forma oficial, un cargamento de cinco millones de focos ahorradores de energía donados por Venezuela para afrontar una crisis de generación eléctrica que afecta a todo el territorio ecuatoriano.
El cargamento, arribó hoy al país y estará dirigido a un programa de ahorro de energía, impulsado por el Gobierno, que consiste en cambiar de forma masiva bombillas incandescentes, que desperdician energía, por focos ahorradores.
Se tiene previsto que mañana se celebre una ceremonia oficial para recibir la donación venezolana de los focos, que ahorran una quinta parte de la energía que consumen los "normales" o incandescentes, de 100 vatios de potencia.
Los focos eficientes serán repartidos a tres millones de familias de escasos recursos en todo el país, a las que se les cambiará, de forma gratuita, las nuevas bombillas en lugar de las antiguas.
Esta campaña de sustitución de focos comenzó en Ecuador a finales de noviembre pasado, con 500 000 unidades ahorradoras adquiridas en el mercado ecuatoriano.
La donación venezolana se da en un momento en que Ecuador sufre una de las peores crisis eléctricas de su historia, debido a una severa sequía en la zona donde se asienta la mayor central hidroeléctrica del país, la planta de Paute.
El pasado 5 de noviembre el Gobierno ecuatoriano aplicó un plan de racionamientos de energía en todo el país para reducir la demanda, situación que no se había producido en los últimos 20 años.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, indicó ayer que se prevé que la crisis de generación de electricidad se extienda hasta enero o febrero próximos, dependiendo de las condiciones del tiempo en la zona de Paute.
Sin embargo, anunció que los días navideños 24, 25, 26 y 27 de diciembre, así como el día 31 de este mes y el 1, 2 y 3 de enero, por las fiestas de Año Nuevo, se suspenderán los racionamientos eléctricos en el país.
Correa comentó que el promedio del caudal de los ríos que alimentan el reservorio de Paute bajó en las últimas semanas por la sequía a 30 metros cúbicos por segundo y remarcó que incluso hubo días en que se redujo hasta 25 metros cúbicos, cuando lo normal es un volumen de 80 metros cúbicos.
Eso ha llevado a que la hidroeléctrica, que en condiciones normales aporta el 35% del total de la electricidad que demanda el país, merme su generación a menos de la mitad de su capacidad. (EFE)
El cargamento, arribó hoy al país y estará dirigido a un programa de ahorro de energía, impulsado por el Gobierno, que consiste en cambiar de forma masiva bombillas incandescentes, que desperdician energía, por focos ahorradores.
Se tiene previsto que mañana se celebre una ceremonia oficial para recibir la donación venezolana de los focos, que ahorran una quinta parte de la energía que consumen los "normales" o incandescentes, de 100 vatios de potencia.
Los focos eficientes serán repartidos a tres millones de familias de escasos recursos en todo el país, a las que se les cambiará, de forma gratuita, las nuevas bombillas en lugar de las antiguas.
Esta campaña de sustitución de focos comenzó en Ecuador a finales de noviembre pasado, con 500 000 unidades ahorradoras adquiridas en el mercado ecuatoriano.
La donación venezolana se da en un momento en que Ecuador sufre una de las peores crisis eléctricas de su historia, debido a una severa sequía en la zona donde se asienta la mayor central hidroeléctrica del país, la planta de Paute.
El pasado 5 de noviembre el Gobierno ecuatoriano aplicó un plan de racionamientos de energía en todo el país para reducir la demanda, situación que no se había producido en los últimos 20 años.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, indicó ayer que se prevé que la crisis de generación de electricidad se extienda hasta enero o febrero próximos, dependiendo de las condiciones del tiempo en la zona de Paute.
Sin embargo, anunció que los días navideños 24, 25, 26 y 27 de diciembre, así como el día 31 de este mes y el 1, 2 y 3 de enero, por las fiestas de Año Nuevo, se suspenderán los racionamientos eléctricos en el país.
Correa comentó que el promedio del caudal de los ríos que alimentan el reservorio de Paute bajó en las últimas semanas por la sequía a 30 metros cúbicos por segundo y remarcó que incluso hubo días en que se redujo hasta 25 metros cúbicos, cuando lo normal es un volumen de 80 metros cúbicos.
Eso ha llevado a que la hidroeléctrica, que en condiciones normales aporta el 35% del total de la electricidad que demanda el país, merme su generación a menos de la mitad de su capacidad. (EFE)