miércoles, 30 de diciembre de 2009

La banca ganó en activos, pero desaceleró su renta

No con la misma potencia con que lo hizo el último lustro, pero el mercado financiero en Ecuador siguió creciendo, aun cuando las industrias de capitales del mundo deambularon titubeantes ante la crisis mundial.

Mientras el Citigroup, banco estadounidense, tuvo que acudir por 45 mil millones de billetes verdes a la Reserva Federal de Estados Unidos, en Ecuador, las entidades financieras asentadas en el país fueron autosuficientes y lograron atajar el “tsunami” financiero que aún recorre los mercados.

Una de las razones que sostiene y aviva el negocio bancario en Ecuador, es la robustez del patrimonio (1.412 millones de dólares), que, entre octubre de 2008 y 2009, se expandió 17,9%, de acuerdo con las estadísticas de la Superintendencia de Bancos. En el campo de las cooperativas, ese rubro se expandió 15%, en el de las mutualistas, 4%, y en el de las sociedades financieras, 22%.

Sin embargo, la materia prima de la banca, los depósitos, decreció 0,83%. El riesgo país, en plena crisis financiera, y la inflación, que restó valor a las compras de los ciudadanos, desmotivaron a los inversionistas y a los ahorradores. ¿Consecuencia? “Menor liquidez en el mercado y menos recursos que se depositen en las arcas bancarias”, dice José Inca, catedrático y analista. A ello se sumó la caída de las remesas.

Aquello originó que las utilidades obtenidas se desaceleren. Las ganancias de la banca cayeron de 326 millones (noviembre 2008) a 194 millones de dólares. Algo que se compesó con eficiencia.

Según César Robalino, presidente de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (ABPE), los gastos operacionales de los bancos, respecto a los recursos captados, se ubicaron, a octubre de este año, en 5,7%. Las inversiones del sistema, compuesto por bancos, cooperativas, sociedades financieras y mutualistas, fueron mayores al sumar, a octubre, 2.248 millones de dólares, 12 millones más que octubre de 2008.