La Agencia de Garantía de Depósitos (AGD) se queda sin tiempo para resolver uno de los temas más espinosos que tiene en carpeta: definir el monto que los ex propietarios del Filanbanco le adeudan al Estado.
El enredo que el Directorio de la AGD -encabezado por la ministra de Finanzas, María Elsa Viteri- tiene que resolver es el cálculo de los intereses que se cobrará a los hermanos William y Roberto Isaías, considerando que el Primer Mandatario se opone el cobro de interés de mora.
El mismo presidente ya dio una alternativa para el cobro: “una tasa libor más algún margen”, dijo en uno de sus enlaces sabatinos en septiembre.
Y esa es ahora una de las opciones de cálculo que barajan en el frente económico: aplicar al monto de la deuda que defina la Junta Bancaria una tasa que resulte de 200 puntos base sobre la tasa libor. Eso representaría un interés promedio anual de 5,65%.
La segunda opción es una tasa similar a la que se coloca la Reserva Internacional de Libre Disponibilidad (RILD) y la última es calcular una tasa por cada año que los Isaías no han honrado su deuda.
Solo que para hacer este cálculo, la AGD necesita que la Junta Bancaria defina el monto total de la deuda sobre la base de la auditoría de la Deloitte&Touch. Todo eso hasta el 31 de diciembre próximo que será la fecha de cierre de la Agencia.
La Ley de Seguridad Financiera, que entró en vigencia el 31 de diciembre de 2008, establece que la AGD “mantendrá su vigencia jurídica a partir de la publicación de la presente ley en el Registro Oficial, por el plazo de un año”.
Y aunque esa norma abre la posibilidad para que el cierre se prorrogue por seis meses, el Gobierno ya anunció que no hará uso de ese tiempo adicional de la ley.
El enredo que el Directorio de la AGD -encabezado por la ministra de Finanzas, María Elsa Viteri- tiene que resolver es el cálculo de los intereses que se cobrará a los hermanos William y Roberto Isaías, considerando que el Primer Mandatario se opone el cobro de interés de mora.
El mismo presidente ya dio una alternativa para el cobro: “una tasa libor más algún margen”, dijo en uno de sus enlaces sabatinos en septiembre.
Y esa es ahora una de las opciones de cálculo que barajan en el frente económico: aplicar al monto de la deuda que defina la Junta Bancaria una tasa que resulte de 200 puntos base sobre la tasa libor. Eso representaría un interés promedio anual de 5,65%.
La segunda opción es una tasa similar a la que se coloca la Reserva Internacional de Libre Disponibilidad (RILD) y la última es calcular una tasa por cada año que los Isaías no han honrado su deuda.
Solo que para hacer este cálculo, la AGD necesita que la Junta Bancaria defina el monto total de la deuda sobre la base de la auditoría de la Deloitte&Touch. Todo eso hasta el 31 de diciembre próximo que será la fecha de cierre de la Agencia.
La Ley de Seguridad Financiera, que entró en vigencia el 31 de diciembre de 2008, establece que la AGD “mantendrá su vigencia jurídica a partir de la publicación de la presente ley en el Registro Oficial, por el plazo de un año”.
Y aunque esa norma abre la posibilidad para que el cierre se prorrogue por seis meses, el Gobierno ya anunció que no hará uso de ese tiempo adicional de la ley.