Lo establece un informe de nueve páginas presentado por la ministra de Patrimonio, María Fernanda Espinosa, el pasado 25 de enero, por pedido del bloque de asambleístas del movimiento Pachakutik.
El documento, firmado electrónicamente por la secretaria de Estado, cuenta las gestiones y actividades realizadas entre abril y diciembre de 2010, pero tiene un denominador común, la mayoría de resultados que se narran fue escrita en forma condicional: los gobiernos “estarían interesados”, “podrían entrar 35 millones de dólares”, “se posicionará la iniciativa”, “agendarían videoconferencias técnicas...”.
Dice el informe, por ejemplo, que en la China asistieron a una gira de cuatro días en agosto. No se explica con quién y con qué tipo de instituciones se reunieron. Como resultado cuentan que lograron el apoyo de 20.000 dólares. No de ninguna institución del gigante asiático, sino de los funcionarios diplomáticos que laboran en la embajada China en Ecuador.
Solo en las reuniones del 24 de ese mismo mes, dentro de la Asamblea General de la ONU, se brindan pistas de lo actuado y conseguido luego de haber explicado la iniciativa a funcionarios de ocho naciones y dos altos funcionarios de la Unión Europea. Lo más concreto que se dice es que: “El viceministro de Relaciones Exteriores de Italia, Vicenzo Scotti, reafirmó su compromiso y su apoyo que sería mediante el canje de deuda”.
Ese mismo día se mantuvieron reuniones con las 15 fundaciones filantrópicas más grandes del planeta: Rockefeller Brothers Fund, Mitsubishi Corporation Fund, Ford Fundation, por citar las principales. El resultado: “se acordó promocionar la iniciativa mediante el sistema pro-bono”. Ni una palabra más.
Al final de ese mismo mes, Espinosa estuvo, junto con su equipo negociador, en Alemania. No detalló con quién viajó. Tampoco con quién se reunió y cuáles fueron los resultados. Luego viajó a España. Mantuvo reuniones en la Secretaría General Iberoamericana. No explica qué se concluyó en esa reunión. Se destaca que se dictó una conferencia a 60 personas.
El 17 y 18 de noviembre la ministra viajó a Noruega. Habló con el ministro del Ambiente y Desarrollo de ese país, Erik Solheim. No hay respuesta anotada. Paralelamente se detalla que Larrea viajó por cuatro ciudades de ese país explicando la propuesta.
El 19 de noviembre viajó a Italia donde logró el más esperanzador de los resultados de su gestión: 35 millones podrían entrar a la iniciativa como parte de canje de deuda pública, que mantiene el Ecuador con Italia, dice el informe.