Después de su segunda presentación en la Quinta Vergara, en la edición 52 del Festival Internacional de la Canción en Viña del Mar, la madrugada de ayer, Fausto Miño dijo que este nuevo show fue diferente porque no estuvo programado. “Fue más natural, canté con un sentimiento de resignación e impotencia por la baja puntuación (3.9) que me dio el jurado el lunes al argumentar que el tema ‘Baila mi vida’ era un pop que no pertenecía a la categoría folclórica, sino a la internacional. Di lo mejor, aunque no era alegría lo que sentía porque tenía claro que los resultados iban a ser similares. Los jueces sostienen que es una buena canción, pero que no pueden darle más de 4 puntos porque no es folclórica y que si Chilevisión se equivocó es un asunto de ellos”.Miño considera que él y Ecuador pagaron los platos rotos de una mala organización. “Fuimos víctimas de la novatada de Chilevisión, cadena que por primera vez toma la batuta de este Festival. Antes lo realizaban otras televisoras como TVN Chile”. Visiblemente triste y a la vez enojado añadió “por ello hicimos una versión folclórica de ‘Baila mi vida’. Fue un trabajo de 3 semanas, había que realizar nuevas partituras. Le dimos más identidad ecuatoriana, se convirtió en un andalere esmeraldeño y nos preparamos en baile para defender el tema. Una semana antes de venir a Viña del Mar nos comunicaron que debía participar con la versión original, con la del disco. Posteriormente cuando llegué al escenario de la Quinta Vergara me dicen que no estoy en la categoría correcta. No jodas”.
Al respecto de esta polémica, el presidente de los jueces, el músico chileno Juan Salazar, lo único que indicó es que fue “un error que afectó la intervención de Fausto en el certamen musical porque el tema no tiene la raíz
Folclórica de otros”.
Mientras que el productor chileno Sergio Vidal recordó que conoció al intérprete hace 4 años. “Vino como mochilero. Le conseguimos pases para que ingrese al evento musical porque soñaba con cantar en la Quinta Vergara. Se quedó a dormir en el sillón de mi sala. Es una lástima lo ocurrido porque considero que sus shows fueron buenos. Los nervios supo controlarlos y el tema es pegajoso. Vi que la gente lo bailaba”.
El retorno de Miño a Ecuador está fijado para el domingo. Ayer tenía previsto reunirse con los niños huérfanos de la aldea SOS de Chile y ofrecer un concierto para los ecuatorianos residentes en ese país y medios de comunicación en el hotel O’Higgins.
