martes, 8 de febrero de 2011

El más buscado del 30-S se entregó ayer a la justicia

Uno de los policías más buscados por la sublevación del 30 de septiembre pasado se entregó ayer. Se trata del sargento Luis Martínez, ex miembro del equipo policial del Grupo de Operaciones Especiales (GAO) y quien es acusado por el Gobierno de ser uno de los principales instigadores de la rebelión policial.

Era buscado desde octubre y la Policía ofreció recompensa por información para capturarlo. Sin embargo, Martínez se entregó voluntariamente en la Presidencia de la República. Luego, fue llevado a la Policía Judicial para que se oficialice su detención. Martínez está acusado por supuesto intento de homicidio del Primer Mandatario y también por insubordinación.

El próximo martes, se conocerá el dictamen del fiscal Luis Enríquez, en el caso por supuesto intento de asesinato.

El Juez Décimo Tercero de Garantías Penales de Pichincha fijó la audiencia para las 08:30.

En este proceso están imputados ocho policías, entre ellos Martínez, el ex director del Hospital de la Policía, César Carrión, y los uniformados Jaime Paucar y Geovanny Chancusi.

En la diligencia, el Fiscal expondrá sus argumentos para absolver o acusar a los imputados.

Por los hechos del 30-S se iniciaron varios procesos: intento de magnicidio, incitación a la rebelión, insubordinación y por daños a la propiedad pública.

El proceso por supuesta incitación a la rebelión, en el que está involucrado el ex militar Fidel Araujo, concluyó la etapa de instrucción fiscal ayer. En un plazo de 15 días el Juez que lleva la causa deberá fijar el día y hora para que se realice la audiencia para emitir el dictamen.

En una de las investigaciones por sublevación de la Escolta Legislativa, el fiscal Miguel Jurado vinculó al policía Carlos Tasinchana en el caso. Por ello, se ampliará la instrucción por 30 días . En este caso están el coronel Edwin Tapia, ex jefe del grupo policial, y Marco Tibán, hermano de la asambleísta Lourdes Tibán.