El Presidente de la República, Rafael Correa, negó que el proyecto de consulta popular pretenda relevar en sus funciones a la Asamblea Nacional o a los gobiernos seccionales.Esto lo aclaró en un conversatorio con los medios de comunicación en donde se le planteó que ciertas reformas constitucionales y legales propuestas por su Gobierno podrían implicar un desconocimiento a las atribuciones jurisdiccionales de los gobiernos autónomos descentralizados.
“Que democracia más directa que la consulta popular. La democracia directa no es excluyente de la democracia representativa y por el contrario ayuda para liberarse de grupos de presión”, señaló el Mandatario, quien agregó que proyectos como la Ley de Comunicación no han podido aprobarse en la Asamblea debido a la acción de grupos interesados y medios de comunicación corruptos “que nos han querido hacer creer que la mejor ley es la que no existe”.
El gobernante insistió en que dadas las circunstancias que rodean a instancias como la Función Judicial, el mejor camino es consultarle directamente al pueblo y que es por eso que el Gobierno defiende el derecho de los ecuatorianos a expresarse en las urnas.
“Este momento la lucha no es por el sí o por el no en la consulta, eso vendrá a su tiempo: Todo el mundo tiene derecho a estar en contra de las preguntas o de decir votemos sí o no. A lo que no hay derecho es a oponerse a la consulta en sí. No vamos a permitir que entre cuatro paredes se nos niegue el derechoa a pronunciarnos”, indicó el Jefe de Estado, quien rechazó los argumentos que señalan que el contenido de las preguntas y de los anexos del proyecto de referéndum es muy complejo para ser entendido por la población.
“La substancia está en la pregunta original y no en los anexos, los anexos son tecnicismos. Yo creo que el pueblo ecuatoriano tiene el suficiente discernimiento para contestar sí o no”, enfatizó el Presidente.
Él insistió en cuestionar la actitud asumida no solo por los sectores de la oposición sino también por antiguos colaboradores del Gobierno quienes ahora cuestionan la consulta popular.
“¿Por qué en 2007 sí era bueno y ahora no? El no a la consulta es una campaña en la que está la prensa corrupta, los grupos de poder, la derecha y la izquierda hoy unidos. Eso es antidemocrático, ilegítimo, profudamente y deshonesto”, señaló el gobernante.
Acerca de las opiniones que señalan que el Gobierno planteó la consulta por las presiones de la ciudadanía y de la oposición acerca del tema de la inseguridad ciudadana, el Jefe de Estado señaló que son los sectores contrarios a su Gobierno los que cayeron en su propia trampa.
Recordó que fueron dirigentes políticos como Cinthya Viteri ( del movimiento Madera de Guerrero) y el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot (Partido Social Cristiano) quienes hablaban de la necesidad de consultarle al pueblo sobre reformas penales para combatir la delincuencia.
En ese contexto, señaló que el Gobierno ha aceptado este reto y por eso es que ahora los opositores están nerviosos pues cayeron en su propia trampa. /Presidencia
