lunes, 6 de septiembre de 2010

El arroz de verano sufre baja productiva

Desde finales de agosto, varios sectores del litoral iniciaron la cosecha de verano del arroz.

Un agricultor de santa Lucía, en la provincia del Guayas, anticipa una significativa disminución en la producción de las tres hectáreas de gramínea que ha cultivado este verano y cuya cosecha oficial está próxima.

Los productores aseguraron que las piladoras están adquiriendo el arroz a los 28 dólares que fijó el Gobierno

Felipe Cortés, del sector de la Cooperativa Agropecuaria Alianza Definitiva de Daule, es otro productor de arroz que ve cómo la producción de esta cosecha de verano se ha mermado. Él también obtuvo 40 sacos de arroz, del mínimo de 50 por hectárea que proyectaba en un inicio.

“Esta cosecha será regular, es decir que no subirá ni aumentará, a diferencia de otras que han sido malas”, manifiesta Cortés, quien al igual que Plúas dice que al término de esta recolección veranera reportará una mínima utilidad o solo recuperará la inversión efectuada.

Esto, pese a que sus cosechas serán comercializadas al precio oficial de 28 dólares que cuesta la saca de 200 libras de arroz en cáscara. Aseguran que el valor se está respetando, de lo contrario podrían, inclusive, tener pérdidas.

Los casos de Plúas y Cortés son solo dos de los miles de productores del país que verán disminuir su producción de arroz en este verano, que en pocos días inicia la cosecha oficial.

Según datos del sector arrocero del país, de las 150.000 hectáreas sembradas para este verano, se estimaba obtener alrededor de 345.000 toneladas métricas de la gramínea, ya piladas.

Pero, por las causas expuestas antes por los mencionados agricultores, la cifra tendería a disminuir, indica Tulio Reyes, vicepresidente de la Corporación de Industriales Arroceros del Ecuador (Corpcom).

Reyes sostiene que aún se desconoce cuánto se afectará la producción veranera por las bajas temperaturas que hay en la noche, así como por otras situaciones externas.

Por ello, menciona que el sector dejará avanzar la cosecha para ver cuáles serán sus rendimientos promedios, ya que actualmente “no es posible predecirlo”.

345.000 toneladas métricas de la gramínea preveía obtener en la presente cosecha el sector arrocero nacional

“Creo que en un mes más sabremos cómo está saliendo la producción en promedio, multiplicamos por el área y de allí sabremos cuál será la cosecha final”, explica el industrial arrocero.

El representante de Corpcom señala que como medida para solucionar esta problemática a futuro, la agremiación realiza una serie de capacitaciones y asistencia técnica a los productores, en especial a los pequeños y medianos arroceros, para mejorar la productividad de sus cultivos.

De igual forma, tanto Plúas como Cortés solicitaron al Instituto Nacional Autónomo de Investigaciones Agropecuarias (Iniap) producir nuevas variedades de semillas del grano de alta productividad y resistentes a enfermedades y a los cambios climáticos.

La UNA está preparada

Pese a conocerse de antemano que la producción de arroz de verano será regular, la Unidad Nacional de Almacenamiento (UNA) ya se encuentra preparada para receptar parte de la cosecha.

Eduardo Bejarano, gerente general de la UNA, dice que la entidad continuará comprando el producto a los 28 dólares oficiales la saca; lo hará en los silos de Daule y Babahoyo, que tienen capacidad para receptar 9.000 y 30.000 toneladas métricas de la gramínea, respectivamente.

Se unirán -en un principio- alrededor de 40 bodegas de campo contratadas por la UNA, a fin de regular el negocio arrocero. “Más adelante llegarían a unas 80 bodegas”, acota.

“Vamos a aplicar las bodegas de campo en un menor número, porque no hay arroz como el año pasado, por lo que nos estamos preparando para eso. Además, vamos a comprar algo de soya, porque tenemos también las plantas listas para recibir estos granos”, insiste.

Según datos de la UNA, en la pasada cosecha de invierno de arroz la entidad compró a los productores más de 130.000 toneladas de la gramínea en cáscara en las bodegas de campo y silos.

Bejarano asegura que la situación que enfrenta el sector arrocero no afectará en absoluto al consumo nacional del grano, que es de 45.000 toneladas mensualmente.

Respecto a las exportaciones de arroz a Venezuela, las cuales se encontraban estancadas por problemas portuarios, el titular de la UNA indicó que en los próximos días viajará a dicho país, a fin de reactivar la venta.

“Me voy este jueves (a Venezuela) para enviar unas 40.000 ó 45.000 toneladas de arroz a ese país, posiblemente en octubre”, anticipa.