Las observaciones hechas a inicios de 2010 por el presidente Rafael Correa a varias condiciones fijadas en el primer borrador del fideicomiso Yasuní-ITT, a las que calificó como "vergonzosas", por considerar que atentaban contra la soberanía nacional, fueron replantedas y recibieron finalmente el visto bueno del jefe de Estado y del PNUD.
A decir de Carlos Larrea, secretario técnico de la iniciativa, el nuevo fideicomiso tiene una "estructura jurídica óptima" para ejecutar los proyectos acordados entre el Gobierno y los contribuyentes, los cuales serán financiados con las contribuciones que el país reciba por no explotar cerca de 900 millones de barriles de crudo del bloque ITT, ubicado en la reserva natural Yasuní. Hoy, a las 11:00, se firma el documento en la Cancillería. (MBJ)
Versión anterior
Las decisiones se debían tomar siempre bajo consenso.
Los aportantes constaban bajo la figura de "donantes".
Proteccion efectiva, incluía la preservación de 10 millones de hectáreas de áreas protegidas y de territorios indígenas.
El capital captado por el fideicomiso se invertirá en proyectos de energía renovable, deforestación evitada, reforestación y desarrollo social.
RECURSOS. Si el fideicomiso no alcanzaba a recaudar los recursos mínimos establecidos (alrededor de $3 600 millones por año), lo obtenido pasaría a formar un fondo ambiental nacional.
Versión actual
VOTO DIRIMENTE. En caso de decisiones que requieran votación y esta resulte un empate, el Ecuador tendrá voto dirimente.
Los aportantes se denominan "contribuyentes", lo que genera una corresponsablidad en el proyecto.
Protección efectiva se limita a 5 millones de hectáreas, en las que se incluyen 44 parques nacionales. No constan los territorios indígenas.
ADICIONAL a los proyectos señalados en el anterior documento, se incluye el proyecto de aumento de la eficiencia energética en el Ecuador.
SE ELIMINÓ esta disposición, y se enfatiza que los proyectos serán ejecutados exclusivamente por el Estado ecuatoriano y que el país decidirá si es pertinente la participación adicional de alguna otra unidad ejecutora para administrar lo fondos.
A decir de Carlos Larrea, secretario técnico de la iniciativa, el nuevo fideicomiso tiene una "estructura jurídica óptima" para ejecutar los proyectos acordados entre el Gobierno y los contribuyentes, los cuales serán financiados con las contribuciones que el país reciba por no explotar cerca de 900 millones de barriles de crudo del bloque ITT, ubicado en la reserva natural Yasuní. Hoy, a las 11:00, se firma el documento en la Cancillería. (MBJ)
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Las decisiones se debían tomar siempre bajo consenso.
Los aportantes constaban bajo la figura de "donantes".
Proteccion efectiva, incluía la preservación de 10 millones de hectáreas de áreas protegidas y de territorios indígenas.
El capital captado por el fideicomiso se invertirá en proyectos de energía renovable, deforestación evitada, reforestación y desarrollo social.
RECURSOS. Si el fideicomiso no alcanzaba a recaudar los recursos mínimos establecidos (alrededor de $3 600 millones por año), lo obtenido pasaría a formar un fondo ambiental nacional.
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VOTO DIRIMENTE. En caso de decisiones que requieran votación y esta resulte un empate, el Ecuador tendrá voto dirimente.
Los aportantes se denominan "contribuyentes", lo que genera una corresponsablidad en el proyecto.
Protección efectiva se limita a 5 millones de hectáreas, en las que se incluyen 44 parques nacionales. No constan los territorios indígenas.
ADICIONAL a los proyectos señalados en el anterior documento, se incluye el proyecto de aumento de la eficiencia energética en el Ecuador.
SE ELIMINÓ esta disposición, y se enfatiza que los proyectos serán ejecutados exclusivamente por el Estado ecuatoriano y que el país decidirá si es pertinente la participación adicional de alguna otra unidad ejecutora para administrar lo fondos.