Así lo indica la ambientalista Inés Manzano. Aunque reconoce que la idea es muy buena, el reflejo de lo que sucede en Ecuador incide en la poca respuesta que ha tenido.
La experta en asuntos ambientales señala que cuando se va a la Organización de Naciones Unidas a pedir un espaldarazo para este tipo de propuestas, no puede irse con un proyecto inicial sino que primero debe hacerse que las otras naciones acepten nociones generales.
Explica que el proyecto Yasuní - ITT (Ishpingo - Tambococha - Tiputini) ha tenido tres cambios en las propuestas pese a que tan solo posee 3 años de gestión, desde que Rafael Correa asumió la Presidencia.
Si bien se emitirán certificados de garantía para que el donante del proyecto ITT sepa que su aporte irá a un fondo manejado por el programa de la ONU para el desarrollo, existen aspectos coyunturales que inciden en una desconfianza hacia el proyecto.
Entre esos factores, Manzano señala la importación de siete nuevas generadores debido a la actual crisis energética e imponer incentivos al diesel en lugar de concederlos a energías limpias.
A esto agrega la dicotomía y doble discurso que expresa el Jefe de Estado sobre imponer un plazo hasta junio del 2010 para concretar el proyecto o de anunciar una posible explotación de las zonas del ITT fuera del parque Yasuní.
Según la abogada, se necesitan implementar muchos de los proyectos que constan en el Plan Nacional de Desarrollo, propuestos por el propio Canciller Fander Falconí cuando estaba en la Senplades; además, direccionar incentivos y fomentar que el sector privado intervenga estos proyectos.
Ahora que Ecuador presidirá la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) desde enero del 2010, Manzano cree oportuno insistir en iniciativas como el impuesto del 3% por la explotación de crudo.
Según ella, lo que se necesita es que realmente haya una demostración de la comunidad internacional que las cosas se hacen bien. "No le puedes decir a la comunidad internacional que te dé el dinero si tus políticas, reacciones y pasos no están yendo hacia una economía cero en carbono sino que están yendo al lado opuesto", recalca.
Indica que en la XV Conferencia Internacional sobre el Cambio Climático que se realiza en Copenhague, Dinamarca, Ecuador presentó dos proyectos: el ITT y Sociobosque "por tercera vez cuando nosotros tenemos prohibidos por la Constitución el pago por servicios ambientales y ellos siguen hablando de eso.
La experta en asuntos ambientales señala que cuando se va a la Organización de Naciones Unidas a pedir un espaldarazo para este tipo de propuestas, no puede irse con un proyecto inicial sino que primero debe hacerse que las otras naciones acepten nociones generales.
Explica que el proyecto Yasuní - ITT (Ishpingo - Tambococha - Tiputini) ha tenido tres cambios en las propuestas pese a que tan solo posee 3 años de gestión, desde que Rafael Correa asumió la Presidencia.
Si bien se emitirán certificados de garantía para que el donante del proyecto ITT sepa que su aporte irá a un fondo manejado por el programa de la ONU para el desarrollo, existen aspectos coyunturales que inciden en una desconfianza hacia el proyecto.
Entre esos factores, Manzano señala la importación de siete nuevas generadores debido a la actual crisis energética e imponer incentivos al diesel en lugar de concederlos a energías limpias.
A esto agrega la dicotomía y doble discurso que expresa el Jefe de Estado sobre imponer un plazo hasta junio del 2010 para concretar el proyecto o de anunciar una posible explotación de las zonas del ITT fuera del parque Yasuní.
Según la abogada, se necesitan implementar muchos de los proyectos que constan en el Plan Nacional de Desarrollo, propuestos por el propio Canciller Fander Falconí cuando estaba en la Senplades; además, direccionar incentivos y fomentar que el sector privado intervenga estos proyectos.
Ahora que Ecuador presidirá la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) desde enero del 2010, Manzano cree oportuno insistir en iniciativas como el impuesto del 3% por la explotación de crudo.
Según ella, lo que se necesita es que realmente haya una demostración de la comunidad internacional que las cosas se hacen bien. "No le puedes decir a la comunidad internacional que te dé el dinero si tus políticas, reacciones y pasos no están yendo hacia una economía cero en carbono sino que están yendo al lado opuesto", recalca.
Indica que en la XV Conferencia Internacional sobre el Cambio Climático que se realiza en Copenhague, Dinamarca, Ecuador presentó dos proyectos: el ITT y Sociobosque "por tercera vez cuando nosotros tenemos prohibidos por la Constitución el pago por servicios ambientales y ellos siguen hablando de eso.
