jueves, 10 de febrero de 2011

Cabezas respondió a Diario El Universo

En un conversatorio con los medios de comunicación, la asambleísta y vicepresidenta de la Asamblea Nacional, Irina Cabezas se defendió de las acusaciones que Diario El Universo hizo en su contra, publicando información a la que Cabezas calificó de difamatoria y malintencionada.

Aclaró que su vida política inicia con Alianza PAIS, por lo que no tiene antecedente político alguno que pueda vincularla con partidos tradicionales y que está siendo objeto de una campaña mediática orquestada por el diario guayaquileño.

Dijo además que las insinuaciones y difamaciones emitidas por El Universo intentan dañar la honra de su familia y la suya propia. Por lo que presentó varios documentos, con el fin de demostrar que la información publicada es tergiversada.

Según Cabezas, su familia adquirió una casa, como lo hace cualquier familia de Ecuador. “Aspiramos a tener una vivienda ¿eso es un pecado?”, dijo a los medios de comunicación, añadiendo que el barrio donde adquirió su casa no es lujoso, como afirma El Universo, sino un barrio residencial de clase media en Pomasqui.

El inmueble fue adquirido con un crédito hipotecario que suma 130 mil dólares mediante el Banco del Pichincha, de cuya institución mostró una certificación que avala lo que aseveró.

De igual manera desmiente beneficio alguno o tráfico de influencias en dos viajes que hizo la funcionaria hacia el exterior (a Ginebra y Taiwán), en compañía de su esposo, Santiago Delgado. “Mi esposo me acompañó con sus propios medios”, explicó en el caso de Ginebra, afirmando que en el caso de Taiwán, fue el propio gobierno oriental el que invitó a ella y a su esposo a efectuar el viaje.

De esta forma rechazó –justificadamente- las imputaciones e insinuaciones del medio, negando que haya utilizado su posición como asambleísta para tramitar puestos laborales para su familia. “La única familiar que trabaja en institución del Estado, luego de mi ascenso, es mi hermana Olga Cabezas, la misma que ha cumplido un perfil en el cargo que ocupa”, dijo, desmintiendo que haya sido –como se publicó- tramitadora de una empresa.

De igual manera, explicó que su hermano Raúl Cabezas sí trabajó en la Contraloría General del Estado hasta septiembre de 2010 en calidad de asistente, y sin ocupar un cargo dirigencial, que sería más relacionado con el tráfico de influencias.

Asimismo, desmintió que sea socia de una empresa de comidas, mostrando una certificación de la Superintendencia de Compañías que avala su desvinculación con la entidad a la que el diario hizo alusión.

Expresó, decepcionada, que la prensa debería evitar dañar la honra y el nombre de los funcionarios de servicio público, puesto que el daño puede ser grave incluso para la familia.

“Tengo conocimiento y estoy pidiendo oficialmente, que los medios y las radios locales de Tungurahua también se ha dado una mala interpretación y se está jugando con el nombre mío”, informó.

Finalmente anunció que tiene conocimiento que el día de mañana se publicará otro tipo de agresiones contra otros compañeros. “Esperemos que la ciudadanía rechace y conozca lo que está sucediendo en el mundo político”, acotó. /SD Prensa Presidencial