El Gobierno descartó la posibilidad de declarar el Estado de Excepción en la provincia del Guayas, como fue solicitado por la Junta Cívica de Guayaquil (JCG) y la Asociación de Barrios, con el objetivo de frenar la delincuencia.
“No creo que tengamos necesidad de declarar un estado de excepción, estamos actuando con toda las capacidad que tenemos y si en algún momento aquello es necesario, siempre es un recurso constitucional que podemos tenerlo, pero por el momento no vamos a tomar esa medida”, afirmó el ministro de Seguridad Interna y Externa, Miguel Carvajal. En ese sentido, recordó que el ministerio de Gobierno anunció hace pocos días, la aplicación de una serie de medidas de seguridad y de investigación para tratar de desarmar las posibles bandas.
En declaraciones a la prensa, antes de ingresar a un Taller de Seguridad que se desarrolló en Carondelet, Carvajal reiteró además que desde hace varios meses se trabaja en la configuración de una Unidad de Seguridad Presidencial que tiene el propósito de lograr una integración, tanto de la Policía, como de elementos civiles.
“Lo fundamental es tener una unidad que funcione de manera eficiente y ligera, necesitamos que no solo existan elementos militares, sino incluir elementos más ligeros en su relación con el público sin menoscabo de los niveles de seguridad”, dijo el funcionario. Incluso mencionó que se requiere de una “serie de ajustes” que han sido sugeridos por varios estudios de seguridad del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, que es quien tiene la responsabilidad de la seguridad presidencial.
En cuanto a las expectativas del Ecuador sobre el nuevo gobierno colombiano, señaló que el país respeta los procesos electorales en todos los países, pero aclaró que “una vez que tengamos un nuevo gobierno evaluaremos los procesos para seguir adelante con los objetivos de una normalización plena de las relaciones”.
En todo caso, advirtió que el Ecuador seguirá demandando al Gobierno colombiano para que refuerce la seguridad en la frontera norte. “El Ecuador hace un esfuerzo gigantesco, tenemos 20 destacamentos militares en la línea de frontera, 7 mil militares, un buen número de policías y requerimos que del lado colombiano exista un control similar de su territorio para que eviten la salida de los grupos irregulares y delincuenciales hacia el Ecuador”, expresó.
Finalmente explicó que el Taller de Seguridad forma parte de un trabajo conjunto que desarrollan todos los ministerios con el propósito de ajustarse a la planificación y a los objetivos estratégicos.
En otro tema, aproximadamente 8 miembros de la Embajada de los Estados Unidos se encontraban en el Palacio de Carondelet para recorrer sus instalaciones, en el marco de la visita de los dos embajadores estadounidenses, Christopher Dodd y Mark Warner, del Partido Demócrata. La delegación estuvo presidida por Marta Youth, encargada de prensa de esta representación diplomática.
“No creo que tengamos necesidad de declarar un estado de excepción, estamos actuando con toda las capacidad que tenemos y si en algún momento aquello es necesario, siempre es un recurso constitucional que podemos tenerlo, pero por el momento no vamos a tomar esa medida”, afirmó el ministro de Seguridad Interna y Externa, Miguel Carvajal. En ese sentido, recordó que el ministerio de Gobierno anunció hace pocos días, la aplicación de una serie de medidas de seguridad y de investigación para tratar de desarmar las posibles bandas.
En declaraciones a la prensa, antes de ingresar a un Taller de Seguridad que se desarrolló en Carondelet, Carvajal reiteró además que desde hace varios meses se trabaja en la configuración de una Unidad de Seguridad Presidencial que tiene el propósito de lograr una integración, tanto de la Policía, como de elementos civiles.
“Lo fundamental es tener una unidad que funcione de manera eficiente y ligera, necesitamos que no solo existan elementos militares, sino incluir elementos más ligeros en su relación con el público sin menoscabo de los niveles de seguridad”, dijo el funcionario. Incluso mencionó que se requiere de una “serie de ajustes” que han sido sugeridos por varios estudios de seguridad del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, que es quien tiene la responsabilidad de la seguridad presidencial.
En cuanto a las expectativas del Ecuador sobre el nuevo gobierno colombiano, señaló que el país respeta los procesos electorales en todos los países, pero aclaró que “una vez que tengamos un nuevo gobierno evaluaremos los procesos para seguir adelante con los objetivos de una normalización plena de las relaciones”.
En todo caso, advirtió que el Ecuador seguirá demandando al Gobierno colombiano para que refuerce la seguridad en la frontera norte. “El Ecuador hace un esfuerzo gigantesco, tenemos 20 destacamentos militares en la línea de frontera, 7 mil militares, un buen número de policías y requerimos que del lado colombiano exista un control similar de su territorio para que eviten la salida de los grupos irregulares y delincuenciales hacia el Ecuador”, expresó.
Finalmente explicó que el Taller de Seguridad forma parte de un trabajo conjunto que desarrollan todos los ministerios con el propósito de ajustarse a la planificación y a los objetivos estratégicos.
En otro tema, aproximadamente 8 miembros de la Embajada de los Estados Unidos se encontraban en el Palacio de Carondelet para recorrer sus instalaciones, en el marco de la visita de los dos embajadores estadounidenses, Christopher Dodd y Mark Warner, del Partido Demócrata. La delegación estuvo presidida por Marta Youth, encargada de prensa de esta representación diplomática.