Unos cuatro mil agremiados a la Federación de Choferes Profesionales del Ecuador marcharon ayer hasta el palacio de gobierno, en el centro de la capital, para exigir la salida de Ricardo Antón, director ejecutivo de la Comisión Nacional de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial (Cntttsv) y rechazar la categorización de licencias de conducción que propone el organismo.
La marcha se inició en el Ministerio de Relaciones Laborales, pasó por la Asamblea Nacional y concluyó en la Plaza de la Independencia. Ahí los manifestantes fueron recibidos por Mario Latorre, asesor del presidente Rafael Correa, quien aseguró que hará conocer los planteamientos de la Federación a las instituciones pertinentes.
Según el secretario general del gremio, Ricardo Onofre, la administración de Antón está plagada de irregularidades y sostuvo que la Cntttsv quiere dividir a los choferes.
Onofre acusó a Antón de supuestos actos de corrupción en la entrega de licencias. Señaló que Antón debe explicar cómo obtuvieron la licencia 336 alumnos en Santo Domingo de los Tsháchilas en el 2009, pues subrayó que los papeles de la Federación de Choferes estaban firmados por personas ajenas a la entidad.
El dirigente insistió que la Federación de Choferes sigue a su mando y desconoció la dirigencia que preside Alberto Arias, quien dirige también la Federación Nacional de Transportistas Urbanos (Fenatu).
Antón minimizó la manifestación y señaló que los que marcharon no fueron transportistas, sino estudiantes de las escuelas de los sindicatos de choferes. Aseguró que envió a los jefes de tránsito a tomar lista a esos planteles para constatar los estudiantes faltantes.
