Hoy, arribará al país el embajador de Ecuador en Israel, Rafael Veintimilla, luego de que el presidente de la República, Rafael Correa, lo llamó a consultas como una medida de rechazo al atentado que provocó la muerte de al menos 10 personas que iban en los camiones que transportaban 10 mil toneladas de ayuda humanitaria.
Durante una entrevista radial que concedió Correa, el pasado martes, a más de rechazar enérgicamente las acciones emprendidas por Israel, sostuvo que existe una doble moral internacional.
“Mientras a nosotros nos quieren boicotear a nivel internacional con el Grupo de Acción Financiera (GAFI), acusándonos de lavadores de activos y de ser financistas de terroristas por el delito de establecer relaciones con Irán, que ha sido sancionado o llamado la atención por el Consejo de Seguridad de la ONU, Israel, país, al que estimamos mucho recurrentemente ha desobedecido todas las resoluciones”, afirmó.
Posterior a este pronunciamiento, el Mandatario llamó a consultas al embajador Veintimilla.
Según el vicecanciller Kintto Lucas, la postura del Gobierno obedece a lo que dice la Constitución.
“Un país que se declara territorio de paz a través de su Constitución y que busca que algún día todo el mundo sea un territorio de paz no puede aceptar ataques a una caravana humanitaria”, señaló el funcionario.
Lucas aclaró que no solo es un llamado de atención de Ecuador, sino de la comunidad internacional.
En unos casos, dijo, los gobiernos emitieron un comunicado, en otros -en cambio- llamaron a consultas a sus embajadores o, simplemente, decidieron romper relaciones con Israel.
Lucas manifestó que la Cancillería esperará conocer la versión de su Embajador en Israel para después buscar un acercamiento con el representante del Gobierno israelí en Ecuador. Aunque aseveró que aún no se ha presentado de parte de la Embajada de Israel algún petitorio para entablar un diálogo con el régimen.
Pese a que ayer se intentó conversar con el Embajador de Israel en el país, no se obtuvo una respuesta favorable.
La primera actividad que realizará Veintimilla al llegar al país, será entrevistarse con el canciller Ricardo Patiño para posteriormente coordinar un encuentro con el Jefe de Estado.
A Veintimilla se le consultará la lectura que tiene con respecto al ataque y cuál es la situación de la población israelí.
El funcionario puntualizó que después de la consulta se verá si es necesario mantenerlo o no en Israel.
Otra posibilidad, indicó es interrumpir de buena forma las relaciones. No obstante, consideró que la postura que ha adoptado Ecuador ante el atentado no tiene por qué afectar las relaciones generales entre ambos países. Sin embargo, para el embajador Luis Narváez, este tipo de hechos pueden provocar un enfriamiento en las relaciones, más no fracturas. Salvo, dijo, que Israel se vea involucrado en un nuevo incidente.
Narváez expuso que es indispensable un manejo geopolítico de la situación tanto a nivel mundial como regional.
Especificó que una cosa son las relaciones bilaterales y otras las multilaterales. No obstante, comentó la necesidad de que la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) tomen una decisión colectiva.
El diplomático destacó que -en un principio- el embajador Veintimilla permanecerá en el país de manera temporal. Todo, expresó, dependerá de que el Gobierno de Israel mejore su conducta.
Durante una entrevista radial que concedió Correa, el pasado martes, a más de rechazar enérgicamente las acciones emprendidas por Israel, sostuvo que existe una doble moral internacional.
“Mientras a nosotros nos quieren boicotear a nivel internacional con el Grupo de Acción Financiera (GAFI), acusándonos de lavadores de activos y de ser financistas de terroristas por el delito de establecer relaciones con Irán, que ha sido sancionado o llamado la atención por el Consejo de Seguridad de la ONU, Israel, país, al que estimamos mucho recurrentemente ha desobedecido todas las resoluciones”, afirmó.
Posterior a este pronunciamiento, el Mandatario llamó a consultas al embajador Veintimilla.
Según el vicecanciller Kintto Lucas, la postura del Gobierno obedece a lo que dice la Constitución.
“Un país que se declara territorio de paz a través de su Constitución y que busca que algún día todo el mundo sea un territorio de paz no puede aceptar ataques a una caravana humanitaria”, señaló el funcionario.
Lucas aclaró que no solo es un llamado de atención de Ecuador, sino de la comunidad internacional.
En unos casos, dijo, los gobiernos emitieron un comunicado, en otros -en cambio- llamaron a consultas a sus embajadores o, simplemente, decidieron romper relaciones con Israel.
Lucas manifestó que la Cancillería esperará conocer la versión de su Embajador en Israel para después buscar un acercamiento con el representante del Gobierno israelí en Ecuador. Aunque aseveró que aún no se ha presentado de parte de la Embajada de Israel algún petitorio para entablar un diálogo con el régimen.
Pese a que ayer se intentó conversar con el Embajador de Israel en el país, no se obtuvo una respuesta favorable.
La primera actividad que realizará Veintimilla al llegar al país, será entrevistarse con el canciller Ricardo Patiño para posteriormente coordinar un encuentro con el Jefe de Estado.
A Veintimilla se le consultará la lectura que tiene con respecto al ataque y cuál es la situación de la población israelí.
El funcionario puntualizó que después de la consulta se verá si es necesario mantenerlo o no en Israel.
Otra posibilidad, indicó es interrumpir de buena forma las relaciones. No obstante, consideró que la postura que ha adoptado Ecuador ante el atentado no tiene por qué afectar las relaciones generales entre ambos países. Sin embargo, para el embajador Luis Narváez, este tipo de hechos pueden provocar un enfriamiento en las relaciones, más no fracturas. Salvo, dijo, que Israel se vea involucrado en un nuevo incidente.
Narváez expuso que es indispensable un manejo geopolítico de la situación tanto a nivel mundial como regional.
Especificó que una cosa son las relaciones bilaterales y otras las multilaterales. No obstante, comentó la necesidad de que la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) tomen una decisión colectiva.
El diplomático destacó que -en un principio- el embajador Veintimilla permanecerá en el país de manera temporal. Todo, expresó, dependerá de que el Gobierno de Israel mejore su conducta.