La cita regional, que se inició a las 16:00. Al no llegar a acuerdos en firme, se propuso que el debate sea abordado por los jefes de Estado en una próxima reunión, que aún no tiene fecha
Tras cuatro horas de diálogo, la Cumbre Extraordinaria de Cacilleres de Unasur llegó a la conclusión que se avizoraba, por las declaraciones previas de los cancilleres Jaime Bermúdez y Nicolás Maduro. No hubo acuerdo entre Colombia y Venezuela para el retorno de la paz y la reanudación de las relaciones bilaterales entre ambos países.
El canciller colombiano Bermúdez dijo que se había llegado a hacer un borrador de acuerdo, pero que al final, su par venezolano no dejó que sucediera. Nicolás Maduro dijo que eso no era verdad (ver recuadros).
A la reunión, presidida por el canciller ecuatoriano Ricardo Patiño, no tuvo acceso la prensa al considerar que los temas a tratarse eran delicados. Sin embargo, al término de la misma, Patiño en primera instancia agradeció a las partes involucradas en el conflicto de mostrar su predisposición al diálogo y buscar un entendimiento que finalmente no llegó. Sin embargo, calificó como un logro que tanto Venezuela como Colombia hayan estado sentados junto a la Presidencia Pro Tempore de Unasur.
El jefe de la política exterior del Ecuador dijo que, lamentablemente, tras la cita no existe un documento oficial firmado que recoja los puntos que fueron tratados en la reunión, pero que bajo su propia responsabilidad los resumía en cinco puntos. Primero, que los estados de Unasur ratificaron su compromiso de crear las mejores condiciones para que la paz reine en la región. Segundo, reafirmar el compromiso de la entidad sudamericana de encontrar salidas pacíficas a los conflictos a través de la vía diplomática. Tercero, disposición de los países miembros para evitar la presencia de grupos irregulares. Cuarto, recoger a través de Presidencia de la Unasur las propuestas de paz originadas en los países miembros. Y quinto, exhortar a los jefes de Estado a una próxima reunión tratar de forma directa los temas que fueron objeto de esta convocatoria.
La reunión. La Reunión Extraordinaria del Consejo de Ministros de Relaciones Exteriores de Unasur se inició con la presencia de los cancilleres de Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Perú, Uruguay, Venezuela y Ecuador, como anfitrión, además de los vicecancilleres de Brasil y Paraguay y un embajador de Surinam, a las 16:00 de ayer, una hora más tarde de la hora convocada.
La cita fue convocada por el Ecuador, que ejerce la presidencia Pro témpore de la Unasur, atendiendo un pedido del presidente de Venezuela Hugo Chávez, para analizar la crisis que enfrenta con su homólogo de Colombia, Álvaro Uribe, luego de que el Gobierno de este último denunciara ante la OEA la presencia de líderes de las FARC en territorio venezolano.
Previo al inicio de la reunión sudamericana, el canciller de Venezuela, Nicolás Maduro, al arribar al Palacio de Najas, a eso de las 13:40 declaró que unos cuatro millones de colombianos, que viven en su país, han manifestado "no querer regresar, debido a la guerra y al dolor de la miseria que viven en Colombia. Nosotros recibimos a colombianos empujados por la guerra, así que hay que buscar un mecanismo de paz", dijo Maduro. Aunque a renglón seguido, calificó a Colombia como "la principal productora y exportadora de cocaína del continente y una de las principales del mundo".
Periodistas colombianos buscaban más declaraciones de Maduro, lo que originó un forcejeo con miembros de seguridad, del que resultó golpeada una periodista de Colombia, lo que fue fustigado por varios comunicadores.
Tras cuatro horas de diálogo, la Cumbre Extraordinaria de Cacilleres de Unasur llegó a la conclusión que se avizoraba, por las declaraciones previas de los cancilleres Jaime Bermúdez y Nicolás Maduro. No hubo acuerdo entre Colombia y Venezuela para el retorno de la paz y la reanudación de las relaciones bilaterales entre ambos países.
El canciller colombiano Bermúdez dijo que se había llegado a hacer un borrador de acuerdo, pero que al final, su par venezolano no dejó que sucediera. Nicolás Maduro dijo que eso no era verdad (ver recuadros).
A la reunión, presidida por el canciller ecuatoriano Ricardo Patiño, no tuvo acceso la prensa al considerar que los temas a tratarse eran delicados. Sin embargo, al término de la misma, Patiño en primera instancia agradeció a las partes involucradas en el conflicto de mostrar su predisposición al diálogo y buscar un entendimiento que finalmente no llegó. Sin embargo, calificó como un logro que tanto Venezuela como Colombia hayan estado sentados junto a la Presidencia Pro Tempore de Unasur.
El jefe de la política exterior del Ecuador dijo que, lamentablemente, tras la cita no existe un documento oficial firmado que recoja los puntos que fueron tratados en la reunión, pero que bajo su propia responsabilidad los resumía en cinco puntos. Primero, que los estados de Unasur ratificaron su compromiso de crear las mejores condiciones para que la paz reine en la región. Segundo, reafirmar el compromiso de la entidad sudamericana de encontrar salidas pacíficas a los conflictos a través de la vía diplomática. Tercero, disposición de los países miembros para evitar la presencia de grupos irregulares. Cuarto, recoger a través de Presidencia de la Unasur las propuestas de paz originadas en los países miembros. Y quinto, exhortar a los jefes de Estado a una próxima reunión tratar de forma directa los temas que fueron objeto de esta convocatoria.
La reunión. La Reunión Extraordinaria del Consejo de Ministros de Relaciones Exteriores de Unasur se inició con la presencia de los cancilleres de Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Perú, Uruguay, Venezuela y Ecuador, como anfitrión, además de los vicecancilleres de Brasil y Paraguay y un embajador de Surinam, a las 16:00 de ayer, una hora más tarde de la hora convocada.
La cita fue convocada por el Ecuador, que ejerce la presidencia Pro témpore de la Unasur, atendiendo un pedido del presidente de Venezuela Hugo Chávez, para analizar la crisis que enfrenta con su homólogo de Colombia, Álvaro Uribe, luego de que el Gobierno de este último denunciara ante la OEA la presencia de líderes de las FARC en territorio venezolano.
Previo al inicio de la reunión sudamericana, el canciller de Venezuela, Nicolás Maduro, al arribar al Palacio de Najas, a eso de las 13:40 declaró que unos cuatro millones de colombianos, que viven en su país, han manifestado "no querer regresar, debido a la guerra y al dolor de la miseria que viven en Colombia. Nosotros recibimos a colombianos empujados por la guerra, así que hay que buscar un mecanismo de paz", dijo Maduro. Aunque a renglón seguido, calificó a Colombia como "la principal productora y exportadora de cocaína del continente y una de las principales del mundo".
Periodistas colombianos buscaban más declaraciones de Maduro, lo que originó un forcejeo con miembros de seguridad, del que resultó golpeada una periodista de Colombia, lo que fue fustigado por varios comunicadores.