El ministro Coordinador de Sectores Estratégicos, Jorge Glas, ratificó que con la promulgación de la Reforma a la Ley de Hidrocarburos en el Registro Oficial, le permite al Estado Ecuatoriano actuar con mayor eficiencia en el manejo de los recursos no renovables de nuestro país, al tiempo que aclaró que de inmediato arranca la renegociación de los contratos petroleros y del cambio del modelo de participación a prestación de servicios.“Que quede claro que de inmediato arranca la renegociación de los contratos petroleros, al amparo de esta nueva Ley y las petroleras (las petroleras privadas) que no quieran acoger las condiciones que se van a plantear prepárense para salir del país, porque eso es lo que va a suceder”, indicó Glas.
Resaltó que con esta Ley, ahora el Estado va a los contratos de prestación de servicios específicos. “Se acabo eso de repartir el petróleo como una pizza, donde el pedazo chiquito siempre le quedaba al Ecuador. Ahora todo el petróleo es nuestro”.
Asimismo, aseguró que esta Reforma a la Ley de Hidrocarburos desde un principio garantizaba que el petróleo sea de los ecuatorianos como lo reza la Constitución Política del Estado y como se está aplicando en el Gobierno de la Revolución Ciudadana.
Glas lamentó que no se haya podido discutir la Ley por temas de plazos y temas jurídicos de la Asamblea Nacional Legislativa, al tiempo que aclaró que la voluntad del Ejecutivo siempre fue que se debata este proyecto.
Sin embargo, añadió que el Ejecutivo “no permitirá que los retrógradas, los padrinos de las empresas petroleras transnacionales sigan haciendo de la suya, no vamos a retroceder en lo absoluto respecto a este tema y hoy más que nunca, cuando tenemos una nueva Ley que nos permite actuar con mayor eficacia para precautelar los recursos no renovables de nuestro país”.
Por su parte, el ministro de Recursos Naturales No Renovables, explicó que de acuerdo con la primera transitoria de la reforma de la Ley de Hidrocarburos que rige desde hoy, las compañías que operan en los bloques tienen 120 días para renegociar sus contratos.
Mientras que las compañías que operan los cambios marginales, tendrán hasta 180 días para cambiar la figura de su contrato. De no concretarse la negociación en estos plazos, los campos serán revertidos al Estado y se les pagará a las empresas por las inversiones no amortizadas.
Pástor manifestó que una vez aprobada la Reforma, en esta semana, “se enviará el modelo de contrato a ser discutido con las compañías petroleras en cuántas rondas sean necesarias. Primero empezaremos a negociar la tarifa que se pagará a cada una de ellas y esperamos que para mediados de agosto tengamos un contrato de adhesión suficientemente discutido y consensuado con las empresas que se quieren quedar en el país”, puntualizó.
