Con cerca de 2 000 visitantes anuales, el lodge Napo Wildlife Center se consolida como uno de los centros de hospedaje nacionales preferidos por el público extranjero. Según Mariela Cárdenas, gerente de ventas de Napo Wildlife Center, el porcentaje de visitantes que llegan del exterior es del 99%. Ellos se hospedan en las 12 cabañas que tiene el complejo turístico.
El Napo Wildlife Center está ubicado en la reserva Yasuní a orillas del lago Añangu y se suma a las cerca de 200 experiencias de turismo comunitario que existen en el Ecuador, según cifras del sector.
Recientemente la organización internacional Rainforest Alliance entregó a este centro de hospedaje el premio Sustainable Standard Setter Award debido a las buenas prácticas que emplea en sus procesos. Con esta actividad la empresa turística emplea a unas 160 personas de la comunidad kichwa amazónica Añangu.
Esta iniciativa comunitaria aplicó unas 400 normas de calidad en temas sociales, ambientales, laborales y económicos, lo que la convierte en "pionera a nivel mundial en este trabajo", reconoció Luis Felipe Duchicela, representante en el Ecuador de Rainforest Alliance.
Sin embargo la historia no termina ahí. Geovanny Rivadeneira, gerente general del lodge, confirmó que la empresa ya está pensando en hacer nuevas inversiones aunque no dio mayores detalles.
"El turismo es el segundo rubro generador de divisas para el país" indicó la ministra de Turismo, Verónica Sión, al tiempo que destacó el trabajo de Napo Wildlife Center: "ejemplo a seguir no solo para las pequeñas operadoras de turismo comunitario, sino también para las grandes empresas del ramo".
Los precios de los paquetes ascienden a $720 por cuatro días, $920 por cinco días y entre $1 200 y $1 500 por mayor tiempo.
Sin embargo, no todo es color de rosa ya que debido a la crisis económica mundial la empresa registra una baja de ingresos del 10%, según indicó Cárdenas.
Por ello, según Verónica Muñoz, enlace técnico para Sudamérica de Rainforest Alliance, para enfrentar la crisis las iniciativas comunitarias de turismo deben implementar estrategias de mercado, mercadeo y posicionamiento del producto.
El Napo Wildlife Center está ubicado en la reserva Yasuní a orillas del lago Añangu y se suma a las cerca de 200 experiencias de turismo comunitario que existen en el Ecuador, según cifras del sector.
Recientemente la organización internacional Rainforest Alliance entregó a este centro de hospedaje el premio Sustainable Standard Setter Award debido a las buenas prácticas que emplea en sus procesos. Con esta actividad la empresa turística emplea a unas 160 personas de la comunidad kichwa amazónica Añangu.
Esta iniciativa comunitaria aplicó unas 400 normas de calidad en temas sociales, ambientales, laborales y económicos, lo que la convierte en "pionera a nivel mundial en este trabajo", reconoció Luis Felipe Duchicela, representante en el Ecuador de Rainforest Alliance.
Sin embargo la historia no termina ahí. Geovanny Rivadeneira, gerente general del lodge, confirmó que la empresa ya está pensando en hacer nuevas inversiones aunque no dio mayores detalles.
"El turismo es el segundo rubro generador de divisas para el país" indicó la ministra de Turismo, Verónica Sión, al tiempo que destacó el trabajo de Napo Wildlife Center: "ejemplo a seguir no solo para las pequeñas operadoras de turismo comunitario, sino también para las grandes empresas del ramo".
Los precios de los paquetes ascienden a $720 por cuatro días, $920 por cinco días y entre $1 200 y $1 500 por mayor tiempo.
Sin embargo, no todo es color de rosa ya que debido a la crisis económica mundial la empresa registra una baja de ingresos del 10%, según indicó Cárdenas.
Por ello, según Verónica Muñoz, enlace técnico para Sudamérica de Rainforest Alliance, para enfrentar la crisis las iniciativas comunitarias de turismo deben implementar estrategias de mercado, mercadeo y posicionamiento del producto.
