miércoles, 27 de mayo de 2009

Correa llama a la resistencia ante la mediocridad y amenaza con decretar el estado de excepción en el sistema educativo.


El Presidente de la República, Rafael Correa, ratificó que se procederá a sancionar con la destitución a los profesores que en segundo señalamiento que será dentro de 30 días no acudan a rendir las evaluaciones. Asimismo, hizo un llamado a los ciudadanos y ciudadanas a unirse este viernes, 29 de mayo en el parque Centenario de Guayaquil para demostrar la resistencia del pueblo ecuatoriano ante la mediocridad de cierta dirigencia del sector educativo. Escuche intervención

Evaluación que hoy de manera vergonzosa rechaza cierta dirigencia de la Unión Nacional de Educadores (UNE).

Los que se llenan la boca de democracia hoy quieren resistirse al Mandato del pueblo ecuatoriano.

Pero en ¿qué consiste la evaluación? La evaluación planteada no es un plan de persecución cuyo el fin último sea el de despedir maestros como pobremente, mediocremente argumentan algunos dirigentes.

Es un proceso serio que califica muchos aspectos del desempeño de un maestro y toma en cuenta para la valoración final el punto de vista de los alumnos, de los padres de familia y por su puesto el nivel de conocimiento de la materia especialidad de educador.

Si en la suma de estas variables el profesor o profesora no alcanzara la calificación mínima, entrará en proceso de capacitación de un año de acuerdo a las insuficiencias para luego de ello ser evaluado nuevamente.

De igual forma los maestros que en las pruebas obtuvieren calificaciones altas serán estimulados con becas y reconocimientos económicos de hasta $1.200 por año.

Es necesario en este país ya empezar a reconocer la excelencia, empezar a ser devotos de la excelencia, jamás confundir democracia con mediocridad.

Mientras tanto comunicó al país que el día de ayer (25 de mayo de 2009) he suscrito el decreto 1740 mediante el cual se procederá a sancionar con la destitución a los profesores que en segundo señalamiento que será dentro de 30 días no acudan a rendir las evaluaciones.


También he ordenado al Ministerio de Finanzas la disposición inmediata de 10 millones de dólares en una partida presupuestaria extraordinaria para la capacitación acelerada de maestros, para reemplazar a los profesores que, insistimos, por segunda ocasión no se presenten a la evaluación.

No nos vamos a someter a la mediocridad de unos cuantos, insisto, no nos vamos a someter a la mediocridad de unos cuantos, es ahora o nunca que cambiamos la educación del país o seguimos sometidos al yugo de unos cuantos aprovechadores.

Aquellos profesores, alumnos y padres de familia que han sido amenazados por esta dirigencia abusiva tengan confianza, tengan fe. Tienen todo el respaldo de las autoridades de Gobierno para, insisto, romper definitivamente el yugo al que ha estado sometida nuestra educación.

Hay que cambiar, pero que cambie el resto, yo me quedo con mis privilegios; los intereses corporativistas de una dirigencia intocable hoy pretenden pesar más que los sagrados principios de la educación y para justificarse invocan el derecho a la resistencia, consagrado en el Art. 99 de la Constitución.

No claudicaremos ecuatorianos, repito, no claudicaremos, ni un solo paso atrás, no retrocederemos ni un solo centímetro.

Fuimos elegidos para generar una transformación profunda en el país y la educación es la base de ese proceso de cambio, por tanto insistimos, ante el desacato irresponsable e irresponsable espíritu de cuerpo de algunos afiliados a la UNE, que se niegan a rendir las pruebas, no nos temblará la mano para tomar todas las medidas necesarias para salvaguardar el sistema educativo ecuatoriano, incluso dentro de esas probables medidas declarar el Estado de Excepción en el sistema educativo.