Las políticas emprendidas por el Gobierno para la banca, como la disminución en las tasas de interés y el bajo costo en la prestación de servicios, podrían disminuir la profundización financiera en el mediano y largo plazo.
"Por este motivo no deberíamos admirarnos que en poco tiempo la gente empiece a reclamar por mayor tecnología, por la reposición de determinados equipos y mejores servicios", manifestó el presidente del Banco de Guayaquil, Guillermo Lasso.
La bancarización del Ecuador es una de las más bajas de la región, superando solo a Paraguay y Argentina. (ver cuadro adjunto).
A escala nacional, la cartera de créditos bruta, por el número de personas, alcanzó unos $481 en 2008, mientras que en 2007 llegó a $441 y en 2006 a $430, según datos de la Superintendencia de Bancos. En cuanto a depósitos, por el número de personas, en 2006 tuvo un promedio de $554. Para 2007 se incrementó a $597 y en 2008 bordeó los $635, señala un documento del ente de control.
Sin embargo, estas cifras contradicen con las de las entidades bancarias, pues el Banco Pichincha autorizó cerrar cerca de 156 mil cuentas de ahorro por falta de movimiento.
Con respecto a esto, Fernando Pozo, gerente general de esa entidad, dijo que esta medida se tuvo que adoptar, ya que representa un alto costo de mantenimiento para la institución. Pero aseguró que "esto no afectó a los clientes de la tercera edad, n beneficiarios de remesas, ni banca comunal".
Además Pozo señaló que en el futuro se podría correr el riesgo de disminuir el número de los servicios para optimizar recursos. "Incluso, en la actualidad, esta institución cerró seis cajeros automáticos en Quito y Guayaquil.
Otras medidas que podrían tomar los bancos, en ciertos servicios será diminuir el horario de atención, la tecnología, el personal y la cantidad de créditos, dijo el ejecutivo.
En el país, 53 de cada 100 habitantes mantienen depósitos en el sistema financiero, de acuerdo con un estudio de la 'Super' de Bancos, al cierre del primer semestre de 2009.
"Por este motivo no deberíamos admirarnos que en poco tiempo la gente empiece a reclamar por mayor tecnología, por la reposición de determinados equipos y mejores servicios", manifestó el presidente del Banco de Guayaquil, Guillermo Lasso.
La bancarización del Ecuador es una de las más bajas de la región, superando solo a Paraguay y Argentina. (ver cuadro adjunto).
A escala nacional, la cartera de créditos bruta, por el número de personas, alcanzó unos $481 en 2008, mientras que en 2007 llegó a $441 y en 2006 a $430, según datos de la Superintendencia de Bancos. En cuanto a depósitos, por el número de personas, en 2006 tuvo un promedio de $554. Para 2007 se incrementó a $597 y en 2008 bordeó los $635, señala un documento del ente de control.
Sin embargo, estas cifras contradicen con las de las entidades bancarias, pues el Banco Pichincha autorizó cerrar cerca de 156 mil cuentas de ahorro por falta de movimiento.
Con respecto a esto, Fernando Pozo, gerente general de esa entidad, dijo que esta medida se tuvo que adoptar, ya que representa un alto costo de mantenimiento para la institución. Pero aseguró que "esto no afectó a los clientes de la tercera edad, n beneficiarios de remesas, ni banca comunal".
Además Pozo señaló que en el futuro se podría correr el riesgo de disminuir el número de los servicios para optimizar recursos. "Incluso, en la actualidad, esta institución cerró seis cajeros automáticos en Quito y Guayaquil.
Otras medidas que podrían tomar los bancos, en ciertos servicios será diminuir el horario de atención, la tecnología, el personal y la cantidad de créditos, dijo el ejecutivo.
En el país, 53 de cada 100 habitantes mantienen depósitos en el sistema financiero, de acuerdo con un estudio de la 'Super' de Bancos, al cierre del primer semestre de 2009.
