Uno de los cambios exigidos por el Presidente de la República, Rafael Correa, es el mecanismo para definir el lugar de pago de los impuestos. El objetivo es que las empresas paguen tributos en el territorio donde producen su riqueza. “De esta manera establecemos una mejor distribución de los ingresos del Estado”, afirmó.
Esto permitirá que las empresas bananeras asentadas en Los Ríos, por ejemplo, paguen impuestos en la provincia donde producen y no en Guayaquil, desde donde salen sus productos al exterior.
“No podemos decir que Guayaquil o Quito pagan más impuestos cuando en esas ciudades se registra el pago por la producción que se genera en otras provincias”, dijo el Mandatario.
Entre las distorsiones están los tributos generados por la producción de petróleo. Esos impuestos deberían pagarse en las provincias amazónicas, sin embargo, se registran en Quito, en donde están ubicadas sus oficinas matrices.
El Presidente explicó que todavía no se ha logrado este cambio porque en el Servicio de Rentas Internas (SRI) aún existen “algunos infiltrados fiscalistas y centralistas que boicotean ese trabajo porque no conviene a grandes ciudades”.
En todo caso, aseguró que este Régimen está reconstruyendo la confianza y una muestra de ello es la atención que se está dando a la Amazonía. “Ahora si se está privilegiando a las zonas que han sido olvidadas durante más de 200 años. Donde mayor inversión pública tenemos por habitante es en las provincias amazonas para recuperarlas del rezago histórico que han sufrido”, indicó.
Esto permitirá que las empresas bananeras asentadas en Los Ríos, por ejemplo, paguen impuestos en la provincia donde producen y no en Guayaquil, desde donde salen sus productos al exterior.
“No podemos decir que Guayaquil o Quito pagan más impuestos cuando en esas ciudades se registra el pago por la producción que se genera en otras provincias”, dijo el Mandatario.
Entre las distorsiones están los tributos generados por la producción de petróleo. Esos impuestos deberían pagarse en las provincias amazónicas, sin embargo, se registran en Quito, en donde están ubicadas sus oficinas matrices.
El Presidente explicó que todavía no se ha logrado este cambio porque en el Servicio de Rentas Internas (SRI) aún existen “algunos infiltrados fiscalistas y centralistas que boicotean ese trabajo porque no conviene a grandes ciudades”.
En todo caso, aseguró que este Régimen está reconstruyendo la confianza y una muestra de ello es la atención que se está dando a la Amazonía. “Ahora si se está privilegiando a las zonas que han sido olvidadas durante más de 200 años. Donde mayor inversión pública tenemos por habitante es en las provincias amazonas para recuperarlas del rezago histórico que han sufrido”, indicó.