El Fondo Japonés para el Desarrollo Social, perteneciente al Banco Mundial (BM), premió y reconoció el proyecto "Derecho y Justicia para los Pobres" en Ecuador como "el de mejores prácticas a nivel mundial", informó hoy el Ministerio de Justicia ecuatoriano.
El premio, que será entregado al ministro de Justicia y Derechos Humanos, Néstor Arbito, el próximo 21 de octubre en Japón, reconoció el proyecto realizado por Projusticia, una unidad técnica adscrita a la Presidencia encargada de la Reforma de la Administración de Justicia en el país andino.
La iniciativa premiada fue ejecutada por el propio Arbito y el actual ministro de Gobierno, Gustavo Jalkh, durante los años 2002 y 2006, "cuando se desempeñaron como Directores de Projusticia", explicó el ministerio en un comunicado. El proyecto se llevó a cabo en 22 provincias, con la donación internacional de 1.780.000 dólares "que posibilitó la intervención en cuatro ejes: Justicia Indígena, Servicios de Resolución Alternativa de Conflictos, Servicios de Defensa Pública y Cultura de Paz", añadió.
El objetivo de la propuesta se orientó a "mejorar los canales de acceso a justicia, fomentar el uso de los medios alternativos de resolución de conflictos e implementar una representación legal calificada en comunidades pobres rurales, urbano marginales y urbanas", agregó.
El Fondo Japonés para el Desarrollo Social, entidad que otorga el premio, ha contribuido en los últimos 10 años al desarrollo de más de 330 proyectos y programas en todo el mundo, en áreas como justicia, educación, seguridad social, salud y agricultura. EFE
El premio, que será entregado al ministro de Justicia y Derechos Humanos, Néstor Arbito, el próximo 21 de octubre en Japón, reconoció el proyecto realizado por Projusticia, una unidad técnica adscrita a la Presidencia encargada de la Reforma de la Administración de Justicia en el país andino.
La iniciativa premiada fue ejecutada por el propio Arbito y el actual ministro de Gobierno, Gustavo Jalkh, durante los años 2002 y 2006, "cuando se desempeñaron como Directores de Projusticia", explicó el ministerio en un comunicado. El proyecto se llevó a cabo en 22 provincias, con la donación internacional de 1.780.000 dólares "que posibilitó la intervención en cuatro ejes: Justicia Indígena, Servicios de Resolución Alternativa de Conflictos, Servicios de Defensa Pública y Cultura de Paz", añadió.
El objetivo de la propuesta se orientó a "mejorar los canales de acceso a justicia, fomentar el uso de los medios alternativos de resolución de conflictos e implementar una representación legal calificada en comunidades pobres rurales, urbano marginales y urbanas", agregó.
El Fondo Japonés para el Desarrollo Social, entidad que otorga el premio, ha contribuido en los últimos 10 años al desarrollo de más de 330 proyectos y programas en todo el mundo, en áreas como justicia, educación, seguridad social, salud y agricultura. EFE