Tras el anuncio del presidente, Rafael Correa, de que nombrará a la ministra coordinadora de la Producción, Nathalie Cely y la asambleísta Aminta Buenaño serán embajadoras de Ecuador en EE.UU. y España, respectivamente, se han tejido diversas reacciones y el Gobierno ya comenzó a preparar el camino para su designación.
Cinco meses después de que Luis Gallegos, exembajador ecuatoriano en EE.UU. fue expulsado de ese país como un gesto recíproco del Gobierno norteamericano, tras la expulsión de Ecuador su exembajadora, Heather Hodges; Cely espera contar con el beneplácito de ese país para asumir la función.
La funcionaria mencionó que se deberá esperar más o menos hasta mediados de diciembre para contar con dicho requerimiento. Además, señaló que mientras tanto no se pronunciará sobre los nuevos retos que deberá asumir.
Por su parte, el canciller, Ricardo Patiño, comentó que presentarán la solicitud de beneplácito y agregó que prefiere mantener “prudencia” sobre el nombre del futuro embajador de EE.UU. en Ecuador.
Críticas
Sectores diplomáticos y políticos criticaron ayer la decisión del Presidente de designar a Buenaño.
El exembajador de Ecuador en Inglaterra, Mauricio Gándara, el exvicecanciller, Marcelo Fernández de Córdoba opinaron. “No se trata de poner a amigos o coidearios, sino a personas que sepan de diplomacia”, dijo Gándara.
Sin embargo, Mauro Andino (PAIS), opinó que Buenaño puede ser un gran aporte para concretar acuerdos importantes.
Fernández de Córdoba agregó que una embajada “delicada”, como la de España, debería tener un representante de carrera y calificó como un nuevo “error diplomático” que la Cancillería haya anunciado su nombramiento, sin antes tener el beneplácito del Gobierno español.
Cinco meses después de que Luis Gallegos, exembajador ecuatoriano en EE.UU. fue expulsado de ese país como un gesto recíproco del Gobierno norteamericano, tras la expulsión de Ecuador su exembajadora, Heather Hodges; Cely espera contar con el beneplácito de ese país para asumir la función.
La funcionaria mencionó que se deberá esperar más o menos hasta mediados de diciembre para contar con dicho requerimiento. Además, señaló que mientras tanto no se pronunciará sobre los nuevos retos que deberá asumir.
Por su parte, el canciller, Ricardo Patiño, comentó que presentarán la solicitud de beneplácito y agregó que prefiere mantener “prudencia” sobre el nombre del futuro embajador de EE.UU. en Ecuador.
Críticas
Sectores diplomáticos y políticos criticaron ayer la decisión del Presidente de designar a Buenaño.
El exembajador de Ecuador en Inglaterra, Mauricio Gándara, el exvicecanciller, Marcelo Fernández de Córdoba opinaron. “No se trata de poner a amigos o coidearios, sino a personas que sepan de diplomacia”, dijo Gándara.
Sin embargo, Mauro Andino (PAIS), opinó que Buenaño puede ser un gran aporte para concretar acuerdos importantes.
Fernández de Córdoba agregó que una embajada “delicada”, como la de España, debería tener un representante de carrera y calificó como un nuevo “error diplomático” que la Cancillería haya anunciado su nombramiento, sin antes tener el beneplácito del Gobierno español.
