martes, 6 de septiembre de 2011

Con robot y vidente buscan a víctimas

El general Maximiliano Larraechea precisó que el robot explorará en partes que “para los buzos es muy complejo llegar” y permitirá“mejorar y agilizar las labores de búsqueda”. Por su parte, el ministro de Defensa, Andrés Allamand, confirmó que una vidente, quien dice ver que hay personas vivas, se encuentra a bordo de uno de los buques de la Armada que rastrea los restos de las víctimas y el avión. “No solamente estamos utilizando todas nuestras capacidades tecnológicas, sino que todas las capacidades, no sé cómo decirlo, humanas y sobrehumanas que puedan existir, sin dejar absolutamente ninguna pista, ningún indicio, ninguna señal al aire”, señaló Allamand, cuñado del desaparecido Felipe Cubillos, encargado de la Fundación Social Levantemos Chile.

Restos humanos encontrados el domingo en el océano fueron trasladados al Servicio Médico Legal en Santiago. El hallazgo reafirmó la tesis de la desintegración del avión CASA 212 por el impacto con el mar. El director del organismo forense, Patricio Bustos, confirmó que se iniciará la toma de muestras de sangre a las familias de los 17 desaparecidos, para avanzar en la creación de un banco genético que permita hacer comparaciones de ADN.

Entre los cuerpos de los 17 desaparecidos se hallan los del popular conductor de televisión estatal, Felipe Camiroaga y otros dos miembros de su equipo; el empresario Felipe Cubillos y cinco colaboradores de su fundación y los de siete funcionarios de la Fach. Ayer se realizaron los funerales de Galia Díaz, del Ministerio de Cultura, y de la periodista de TV Nacional, Silvia Sliner, cuyos cuerpos fueron encontrados el sábado junto a los del también periodista de TVN Roberto Bruce y el cabo de la Fach, Erwin Núñez.

El avión de la Fuerza Aérea partió el viernes con 18 pasajeros y tres tripulantes, rumbo al archipiélago, con ayuda humanitaria para la reconstrucción de la zona insular, azotada por el maremoto de febrero del 2010. La aeronave perdió contacto radial con tierra a las 20:48 tras dos intentos infructuosos de aterrizar en el aeródromo de Juan Fernández, con pistas de tierra y escasa tecnología.

Para el Gobierno, en tanto, el accidente pudo deberse a la conjunción de tres elementos: la dificultad de la pista, el viento y las características de la aeronave, con un tren de aterrizaje fijo, que es peligroso en caso de amerizaje.

El Gobierno desmintió que el avión haya ido con sobrepeso o que le faltara combustible.