“No podemos seguir negociando, si no hay un claro compromiso de los países desarrollados para el segundo período de Kioto”, señalaron los países que conforman el grupo Alianza Bolivariana para los pueblos de América (Alba), frente a los anuncios de algunos países desarrollados que no aceptarán un segundo período de compromisos, en el marco de las negociaciones de cambio climático que se realizan en Cancún, México.
En rueda de prensa, los delegados de Ecuador, Bolivia, Venezuela, Nicaragua, Cuba, Dominica, señalaron que los países desarrollados no pueden desconocer sus responsabilidades históricas ni los acuerdos previamente alcanzados en la Convención Marco de Naciones Unidas de Cambio Climático y el Protocolo de Kioto. La posición de del grupo Alba recibió el respaldo de varios países y sectores, publicó la agencia de noticias Andes.
Tarsicio Granizo, subsecretario de Políticas del Ministerio Coordinador de Patrimonio y jefe de delegación del equipo negociador del Ecuador, resaltó que cualquier resultado en el campo de Cooperación a Largo Plazo, debe estar relacionado con el único régimen climático reconocido que es el Protocolo de Kioto.
Durante las negociaciones, algunos países en desarrollo manifestaron que los países industrializados habían alcanzado un gran nivel de industrialización a costa de una enorme emisión de gases de efecto invernadero, que han afectado a todo el planeta. Es por ello que deben asumir sus responsabilidades. “Primero limpien lo que ensuciaron, para luego pedir a los demás que contribuyan”, señaló uno de los delegados africanos. Esto por cuanto los países desarrollados quieren que todos los países recorten emisiones, sin considerar el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas establecido en la Convención de Cambio Climático.
Varios delegados expresaron su decepción por el proceso de negociación que no tiene avances y que más bien existe gran preocupación por los intentos de retroceder en lo que se ha acordado en la arquitectura financiera actual para combatir el cambio climático. Destacaron que no existe mandato para negociar otro documento, sino que hay que cumplir lo ya establecido en el régimen de cambio climático.
Reafirmaron que lo que tiene que estar claro es que si los países en desarrollo no reciben una señal de los países desarrollados sobre el segundo periodo de compromisos, será muy difícil tener un resultado en esta Conferencia, y ese fracaso será responsabilidad de los países desarrollados.
Tarsicio Granizo señaló, además, que es importante contar con alternativas en las negociaciones, como la propuesta que presentará el Presidente Correa en Cancún, sobre emisiones netas evitadas (ENE) que en síntesis son las emisiones que pudiendo ser realizadas en la economía de cada país, no son emitidas, o las emisiones que existiendo dentro de la economía de cada país, son reducidas. El balance neto es el compensable.
En rueda de prensa, los delegados de Ecuador, Bolivia, Venezuela, Nicaragua, Cuba, Dominica, señalaron que los países desarrollados no pueden desconocer sus responsabilidades históricas ni los acuerdos previamente alcanzados en la Convención Marco de Naciones Unidas de Cambio Climático y el Protocolo de Kioto. La posición de del grupo Alba recibió el respaldo de varios países y sectores, publicó la agencia de noticias Andes.
Tarsicio Granizo, subsecretario de Políticas del Ministerio Coordinador de Patrimonio y jefe de delegación del equipo negociador del Ecuador, resaltó que cualquier resultado en el campo de Cooperación a Largo Plazo, debe estar relacionado con el único régimen climático reconocido que es el Protocolo de Kioto.
Durante las negociaciones, algunos países en desarrollo manifestaron que los países industrializados habían alcanzado un gran nivel de industrialización a costa de una enorme emisión de gases de efecto invernadero, que han afectado a todo el planeta. Es por ello que deben asumir sus responsabilidades. “Primero limpien lo que ensuciaron, para luego pedir a los demás que contribuyan”, señaló uno de los delegados africanos. Esto por cuanto los países desarrollados quieren que todos los países recorten emisiones, sin considerar el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas establecido en la Convención de Cambio Climático.
Varios delegados expresaron su decepción por el proceso de negociación que no tiene avances y que más bien existe gran preocupación por los intentos de retroceder en lo que se ha acordado en la arquitectura financiera actual para combatir el cambio climático. Destacaron que no existe mandato para negociar otro documento, sino que hay que cumplir lo ya establecido en el régimen de cambio climático.
Reafirmaron que lo que tiene que estar claro es que si los países en desarrollo no reciben una señal de los países desarrollados sobre el segundo periodo de compromisos, será muy difícil tener un resultado en esta Conferencia, y ese fracaso será responsabilidad de los países desarrollados.
Tarsicio Granizo señaló, además, que es importante contar con alternativas en las negociaciones, como la propuesta que presentará el Presidente Correa en Cancún, sobre emisiones netas evitadas (ENE) que en síntesis son las emisiones que pudiendo ser realizadas en la economía de cada país, no son emitidas, o las emisiones que existiendo dentro de la economía de cada país, son reducidas. El balance neto es el compensable.