martes, 9 de agosto de 2011

La comprensión de cultura demanda nuevas lecturas

El Ministerio de Cultura, la Casa de la Cultura Ecuatoriana y varios grupos de artistas y gestores en todo el país celebran hoy el Día Nacional de la Cultura con actividades artísticas, encuentros y ferias de libros.
El uso de los espacios públicos es uno de los temas que debaten los gestores culturales y las autoridades del sector público.

El uso de los espacios públicos es uno de los temas que debaten los gestores culturales y las autoridades del sector público.
Redacción Cultura

Hoy, hace 67 años, se fundó la Casa de la Cultura Ecuatoriana. Era el último día de gobierno  de Velasco Ibarra cuando el anhelo de Benjamín Carrión de extender los alcances de un Instituto Cultural Ecuatoriano reduccionista y reaccionario, fundado por Arroyo del Río años antes, se cristalizaba. Resonaba su teoría sobre la nación pequeña y se hablaba por fin de lo “mestizo”. Gracias a este hito, el gobierno del general  Rodríguez Lara  declaró el 9 de agosto Día Nacional de la Cultura.

Sin embargo, ahora, el Ministerio de Cultura del Ecuador, entidad rectora de las políticas en esta materia, habla de “culturas”, así, en plural. “El sujeto cultural ya no es el mismo que se identificaba hace 50 ó 60 años cuando nació la CCE”, dice la ministra de esta Cartera, Érika Sylva. Para ella, la cultura de entonces incluía  solo a los artistas e intelectuales, quienes proponían “un concepto de cultura circunscrito a las bellas artes y un concepto de nación mestiza como el ideal a alcanzar en el marco de un país racista que todavía se miraba como heredero de España”.

Las reflexiones contemporáneas  amplían el espectro de análisis.  Según la escritora brasileña María Alzira Brum, cultura  “tiene que ver con la interactuación transformadora de lo humano: el conocimiento, las creencias, los idiomas, el arte, las leyes, las costumbres y todos los hábitos y aptitudes que adquirimos en la vida en sociedad”.

Erika Sylva, Ministra de Cultura, defiende que la cultura no se circunscribe a las artes sino que es “el modo de ser de la sociedad”, que, por supuesto, involucra a las artes, pero también abraza a la memoria, al patrimonio y a los derechos culturales, a las culturas urbanas y a las culturas en transición, como los grupos GLBT y los migrantes. Por eso, para la Secretaria de Estado, la idea de la nación pequeña que postuló Carrión está siendo superada gracias a que ahora -dice-, el Estado recoge ese orgullo de los afroecuatorianos, los indígenas, los montubios “y eso es histórico  pues estamos frente al desafío de construir un nuevo tipo de nación de la diversidad de pueblos, nacionalidades y culturas que nos componen”. Además, Sylva anunció que este Ministerio prepara un estudio para determinar cuál es el aporte porcentual de la actividad cultural al Producto Interno Bruto del Ecuador, en vista de que nunca un gobierno ha evaluado la dinámica del sector en su productividad.

Avilés dice que  el Estado debe reconocer que de la cultura  nutre también la vida pública. “Antaño, el Estado pensaba que era necesario crear o mantener librerías, cines, teatros, pero hoy habría que replantear esa lectura ya que es posible que para muchos eso no sea lo necesario. Lo importante de las bibliotecas no son los libros, son los lectores, y la cultura debe ser un eje transversal en otras carteras”.

En medio del debate, gestores e instituciones recuerdan este día: La Casa de la Cultura Ecuatoriana  conmemora la fecha con una  Feria de Libros ($1 por cada libro) que estará abierta hasta el próximo  11 de agosto. Habrá recitales poéticos y de cuento. La entrada para el público es libre.