El Comité de Comercio Exterior (Comex) reformó ayer la resolución 17, que dispone la aplicación de licencias de importación para 51 subpartidas como llantas, vehículos, repuestos, celulares, refrigeradoras y línea blanca.
Los miembros del Comex acogieron el planteamiento del Comité Empresarial Ecuatoriano y de los importadores. La decisión fue establecer un régimen de transición que permita a los operadores de comercio adaptarse al nuevo sistema.
Ese régimen durará hasta el próximo 16 de septiembre. "Eso quiere decir que las mercancías sujetas a las nuevas licencias podrán ingresar al país sin esos permisos por dos semanas más", dijo Roberto Aspiazu, director ejecutivo del Comité Empresarial.
En estos momentos, existen embarques que están en altamar y que tienen como destino Ecuador. La disposición es que los pedidos realizados entre el 26 de agosto y el 16 de septiembre de 2011, no requieran del permiso de importación.
El Comex también decidió eliminar los requerimientos que pueden generar demoras indebidas en el otorgamiento de la licencia. Por ejemplo, ya no se exigirá a las empresas el certificado de cumplimiento de inserción laboral de personas discapacitadas ni copias notariadas de cédulas de ciudadanía y certificado de votación.
"Se ha hecho esta reforma a la tramitología, porque existe la vieja costumbre de pedir que papeles públicos se notaricen; algo que hay que erradicar", afirmó la ministra de la Producción, Nathalie Cely.
Un cambio clave es que ya no se exigirá una licencia de importación para cada embarque, pues un importador podrá utilizar el mismo permiso para varias importaciones. Tampoco se exigirá que el producto extranjero sea nacionalizado.
Hay que ir hacia un sistema eficiente, donde no se eliminen los controles, pero tampoco se dé molestias ni mayores costos de tramitación a los ciudadanos ni a las empresas, señaló Cely.
Sus declaraciones las pronunció en el marco del último día de feria de Ecuador Industrial, evento que fue organizado por la Cámara de Industrias de Guayaquil (CIG). En su conferencia se refirió a algunas variables económicas como la inversión pública que, según la ministra, ha crecido a un mayor ritmo que la privada.
"El sector manufacturero pasa por su mejor momento. Desde el 2008 hasta el 2011, las micro y pequeñas empresas han crecido en un 14%, mientras que las medianas en un 16%", mencionó.
La funcionaria aseguró a los empresarios presentes que la innovación y la logística serán dos elementos claves para impulsar la competitividad y la productividad del país.
El análisis del sector continuó dos horas después, cuando el director del Servicio de Rentas Internas (SRI), Carlos Marx Carrasco, y el ministro de Relaciones Laborales, Richard Espinosa, mencionaron sus aportes para el desarrollo del sector.
Marx Carrasco defendió la cultura tributaria que ha venido fortaleciendo en el país y que, a su criterio, no afecta a la clase empresarial por los bajos niveles de imposición fiscal que Ecuador mantiene con respecto a otros países. En una crisis global, dijo, si llegaran a caer los precios del petróleo el país debería mermar su gasto fiscal y no recurrir al sistema tributario para hallar soluciones.
El analista Walter Spurrier recordó la necesidad de la cooperación del sector público y privado. Solo así se podrá cambiar el retroceso del sector industrial en las últimas dos décadas: "Del 1993 al 2011 la participación de la industria en la economía cayó del 14 al 9%".
Los miembros del Comex acogieron el planteamiento del Comité Empresarial Ecuatoriano y de los importadores. La decisión fue establecer un régimen de transición que permita a los operadores de comercio adaptarse al nuevo sistema.
Ese régimen durará hasta el próximo 16 de septiembre. "Eso quiere decir que las mercancías sujetas a las nuevas licencias podrán ingresar al país sin esos permisos por dos semanas más", dijo Roberto Aspiazu, director ejecutivo del Comité Empresarial.
En estos momentos, existen embarques que están en altamar y que tienen como destino Ecuador. La disposición es que los pedidos realizados entre el 26 de agosto y el 16 de septiembre de 2011, no requieran del permiso de importación.
El Comex también decidió eliminar los requerimientos que pueden generar demoras indebidas en el otorgamiento de la licencia. Por ejemplo, ya no se exigirá a las empresas el certificado de cumplimiento de inserción laboral de personas discapacitadas ni copias notariadas de cédulas de ciudadanía y certificado de votación.
"Se ha hecho esta reforma a la tramitología, porque existe la vieja costumbre de pedir que papeles públicos se notaricen; algo que hay que erradicar", afirmó la ministra de la Producción, Nathalie Cely.
Un cambio clave es que ya no se exigirá una licencia de importación para cada embarque, pues un importador podrá utilizar el mismo permiso para varias importaciones. Tampoco se exigirá que el producto extranjero sea nacionalizado.
Hay que ir hacia un sistema eficiente, donde no se eliminen los controles, pero tampoco se dé molestias ni mayores costos de tramitación a los ciudadanos ni a las empresas, señaló Cely.
Sus declaraciones las pronunció en el marco del último día de feria de Ecuador Industrial, evento que fue organizado por la Cámara de Industrias de Guayaquil (CIG). En su conferencia se refirió a algunas variables económicas como la inversión pública que, según la ministra, ha crecido a un mayor ritmo que la privada.
"El sector manufacturero pasa por su mejor momento. Desde el 2008 hasta el 2011, las micro y pequeñas empresas han crecido en un 14%, mientras que las medianas en un 16%", mencionó.
La funcionaria aseguró a los empresarios presentes que la innovación y la logística serán dos elementos claves para impulsar la competitividad y la productividad del país.
El análisis del sector continuó dos horas después, cuando el director del Servicio de Rentas Internas (SRI), Carlos Marx Carrasco, y el ministro de Relaciones Laborales, Richard Espinosa, mencionaron sus aportes para el desarrollo del sector.
Marx Carrasco defendió la cultura tributaria que ha venido fortaleciendo en el país y que, a su criterio, no afecta a la clase empresarial por los bajos niveles de imposición fiscal que Ecuador mantiene con respecto a otros países. En una crisis global, dijo, si llegaran a caer los precios del petróleo el país debería mermar su gasto fiscal y no recurrir al sistema tributario para hallar soluciones.
El analista Walter Spurrier recordó la necesidad de la cooperación del sector público y privado. Solo así se podrá cambiar el retroceso del sector industrial en las últimas dos décadas: "Del 1993 al 2011 la participación de la industria en la economía cayó del 14 al 9%".