En Portovelo y Zaruma, los mineros no tienen más indumentaria que un desgastado casco, un par de botas y en el mejor de los casos, una lámpara con baterías y un chaleco para que cubra la “ropa de trabajo”, que suele ser pantalones y camisetas viejas.
La mayoría de minas tienen como refuerzo de los socavones, sistemas enmaderados en pésimas condiciones. Pocas empresas brindan a sus trabajadores mascarillas, pese a que el gas que emana de las explosiones los puede matar por asfixia. Los accidentes en el elevador son comunes, con el riesgo de caer hasta 30 metros.
A esto se suma la inestabilidad laboral, la masiva contratación de extranjeros, principalmente peruanos, el trabajo de menores de edad. El martes murieron dos trabajadores y otros tres quedaron heridos en tres accidentes.
La mayoría de las 78 minas que están bajo verificación de Riesgos del Trabajo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) presenta bajos niveles de cumplimiento de seguridad industrial. Algunas, incluso, tienen cero cumplimiento. Ese es el caso de la minera Jorupetres-Reyes, donde murió un obrero al caer de un montacargas, al igual que la Minera San Jacinto (Zaruma), donde falleció asfixiado otro minero. Las autoridades anuncian cierres y multas.
Luego del derrumbe registrado en octubre pasado en una mina en Portovelo, donde murieron cuatro obreros, la dirección de Riesgos del Trabajo inició la verificación de cumplimiento de seguridad industrial en 78 minas de El Oro. Primero, según la institución, se hizo un diagnóstico general y se dieron recomendaciones.
Casi al año de ese primer trabajo “se evaluó qué nivel de cumplimiento tuvieron esas recomendaciones y les calificamos mediante índices de gestión”, indicó Juan Vélez, director de Riesgos del Trabajo. “Lamentablemente, luego de terminar este proceso (el viernes pasado) sucede este nuevo accidente”, agregó.
Se determinó que Jorupe tenía cero nivel de cumplimiento. En cambio, la mina San Jacinto estaba fuera del proceso de verificación, recién se va a determinar la responsabilidad de la empresa.
Por lo pronto, Vélez dijo que no se puede adelantar los resultados de las investigaciones en ambos casos, sin embargo, señaló que se puede presumir indicios de responsabilidad. En el primer caso porque “el trabajador murió al caerse del montacarga, probablemente no tenía arnés”, asumió Vélez. En el caso de San Jacinto, en cambio, señaló que el trabajador no debía haber ingresado a la mina sin sistemas que permitan respirar a profundidad.
La mayoría de minas tienen como refuerzo de los socavones, sistemas enmaderados en pésimas condiciones. Pocas empresas brindan a sus trabajadores mascarillas, pese a que el gas que emana de las explosiones los puede matar por asfixia. Los accidentes en el elevador son comunes, con el riesgo de caer hasta 30 metros.
A esto se suma la inestabilidad laboral, la masiva contratación de extranjeros, principalmente peruanos, el trabajo de menores de edad. El martes murieron dos trabajadores y otros tres quedaron heridos en tres accidentes.
La mayoría de las 78 minas que están bajo verificación de Riesgos del Trabajo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) presenta bajos niveles de cumplimiento de seguridad industrial. Algunas, incluso, tienen cero cumplimiento. Ese es el caso de la minera Jorupetres-Reyes, donde murió un obrero al caer de un montacargas, al igual que la Minera San Jacinto (Zaruma), donde falleció asfixiado otro minero. Las autoridades anuncian cierres y multas.
Luego del derrumbe registrado en octubre pasado en una mina en Portovelo, donde murieron cuatro obreros, la dirección de Riesgos del Trabajo inició la verificación de cumplimiento de seguridad industrial en 78 minas de El Oro. Primero, según la institución, se hizo un diagnóstico general y se dieron recomendaciones.
Casi al año de ese primer trabajo “se evaluó qué nivel de cumplimiento tuvieron esas recomendaciones y les calificamos mediante índices de gestión”, indicó Juan Vélez, director de Riesgos del Trabajo. “Lamentablemente, luego de terminar este proceso (el viernes pasado) sucede este nuevo accidente”, agregó.
Se determinó que Jorupe tenía cero nivel de cumplimiento. En cambio, la mina San Jacinto estaba fuera del proceso de verificación, recién se va a determinar la responsabilidad de la empresa.
Por lo pronto, Vélez dijo que no se puede adelantar los resultados de las investigaciones en ambos casos, sin embargo, señaló que se puede presumir indicios de responsabilidad. En el primer caso porque “el trabajador murió al caerse del montacarga, probablemente no tenía arnés”, asumió Vélez. En el caso de San Jacinto, en cambio, señaló que el trabajador no debía haber ingresado a la mina sin sistemas que permitan respirar a profundidad.
