Como malicioso y parcial calificó el ministro de Defensa, Javier Ponce, al uso y presentación que realizó diario El Universo sobre el informe de la Operación “Rescate” que se efectúo el 30 de septiembre de 2010 para liberar al presidente Rafael Correa, quien estuvo detenido contra su voluntad en el Hospital de la Policía Nacional, durante el intento de golpe de Estado.
Ponce aseguró que se está utilizando el documento para asegurar que Correa ordenó disparar durante el operativo para “justificar la calumnia de Emilio Palacio”, ex editor de Opinión de El Universo.
En el documento, de forma cronológica, se narra en 13 páginas cómo, desde el ámbito militar, se realizó el rescate del Mandatario, quien según el informe de la operación fue “retenido por miembros insurrectos de la Policía Nacional” en el hospital de dicha institución.
Al respecto, Ponce dijo que es necesario aclarar que el informe nunca fue ocultado deliberadamente por la institución, ya que fue entregado tanto a la Presidencia de la República como a la Fiscalía General del Estado para que se investiguen los hechos del 30 de septiembre.
Las 13 hojas del informe que Jorge Peña, director de Operaciones del Comando Conjunto, certificó el 18 de octubre de 2010 establece que el operativo se ejecutó en dos momentos que deben ser tomados en cuenta, añadió Ponce.
El primero tiene que ver “con la decisión del rescate”, y el segundo “cuando se insiste en que esta operación tendría un carácter estrictamente de disuasión”, lo que implicaba la no utilización de armas letales.
En el informe se establece que elementos de la Brigada de Infantería No. 13, del Batallón de Ingenieros No. 69, de la Escuela de Servicios y Especialistas del Ejército y Batallón de Comunicaciones No. 1, fuerzas que conformaban el cerco externo, bloquearon cualquier tipo de refuerzo que podrían recibir elementos policiales, así como también apoyaban la salida de la población civil que se encontraba dentro del hospital.
El Secretario de Estado añadió que únicamente parte del personal debía llevar armamento letal, en caso de ser necesario su empleo, de acuerdo con la situación en el área de rescate. “Es absolutamente falso e injustificado que se hable de que se ordenó atacar el hospital. No hubo orden de disparar, lo que se ordenó fue la liberación del Presidente que se encontraba retenido”, aclaró.
El Ministro concluyó que es injustificado y falso que se hable de haber ordenado un ataque a un hospital, como se pretende afirmar. “No hay ninguna orden de disparar. Lo que se ordenó es la liberación del Presidente que se encontraba detenido en el hospital oficial”, dijo.
Ponce aseguró que se está utilizando el documento para asegurar que Correa ordenó disparar durante el operativo para “justificar la calumnia de Emilio Palacio”, ex editor de Opinión de El Universo.
En el documento, de forma cronológica, se narra en 13 páginas cómo, desde el ámbito militar, se realizó el rescate del Mandatario, quien según el informe de la operación fue “retenido por miembros insurrectos de la Policía Nacional” en el hospital de dicha institución.
Al respecto, Ponce dijo que es necesario aclarar que el informe nunca fue ocultado deliberadamente por la institución, ya que fue entregado tanto a la Presidencia de la República como a la Fiscalía General del Estado para que se investiguen los hechos del 30 de septiembre.
Las 13 hojas del informe que Jorge Peña, director de Operaciones del Comando Conjunto, certificó el 18 de octubre de 2010 establece que el operativo se ejecutó en dos momentos que deben ser tomados en cuenta, añadió Ponce.
El primero tiene que ver “con la decisión del rescate”, y el segundo “cuando se insiste en que esta operación tendría un carácter estrictamente de disuasión”, lo que implicaba la no utilización de armas letales.
En el informe se establece que elementos de la Brigada de Infantería No. 13, del Batallón de Ingenieros No. 69, de la Escuela de Servicios y Especialistas del Ejército y Batallón de Comunicaciones No. 1, fuerzas que conformaban el cerco externo, bloquearon cualquier tipo de refuerzo que podrían recibir elementos policiales, así como también apoyaban la salida de la población civil que se encontraba dentro del hospital.
El Secretario de Estado añadió que únicamente parte del personal debía llevar armamento letal, en caso de ser necesario su empleo, de acuerdo con la situación en el área de rescate. “Es absolutamente falso e injustificado que se hable de que se ordenó atacar el hospital. No hubo orden de disparar, lo que se ordenó fue la liberación del Presidente que se encontraba retenido”, aclaró.
El Ministro concluyó que es injustificado y falso que se hable de haber ordenado un ataque a un hospital, como se pretende afirmar. “No hay ninguna orden de disparar. Lo que se ordenó es la liberación del Presidente que se encontraba detenido en el hospital oficial”, dijo.