CARACAS. El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, hizo ayer su primera aparición pública sin cabello al participar en la ceremonia de juramentación de varios de sus nuevos ministros.
"Is my new look (es mi nueva imagen)", bromeó el jefe de Estado en inglés al aludir a su cabeza rapada, que lució en el acto oficial.
Chávez, que lucía un traje negro con corbata roja y gafas, tomó juramento al ministro de Cultura, Pedro Calzadilla, a la de la Juventud, María del Pilar Hernández, así como al comandante de la brigada de la guardia de honor presidencial, Wilfredo Figueroa Chacín.
Sobre la caída del cabello, explicó que la quimioterapia "ataca con prioridad aquellas células del cuerpo que experimentan rápido crecimiento", entre las que citó el folículo capilar. "Eso indica que está funcionando el tratamiento", agregó.
El Mandatario venezolano había anticipado que se cortaría el cabello, después de que en la noche del domingo sintiera que se le cayó un "pedazo".
"Saldré Yul Brynner", había anunciado, en alusión al actor famoso por su cabeza pelada.
Chávez cuestionó las especulaciones de la oposición en torno a su enfermedad y descartó que padezca de cáncer en el colón, recto o la nariz, como, según dijo, han asegurado.
Insistió que no tiene células cancerígenas en su cuerpo y precisó que se sometió a la quiomioterapia para atacar la enfermedad.
Al acto de juramentación no asistió la recién designada ministra para Servicios Penitenciarios, Iris Varela, debido a un resfriado. "Te juramentaré cuando te pase la gripe", dijo Chávez, al dirigirse a la nueva funcionaria.
Chávez informó el 30 de junio al país de su cáncer y sigue un tratamiento que continuará en los próximos días con nuevos ciclos de quimioterapia.
El presidente paraguayo, Fernando Lugo, regresó a Asunción tras los exámenes a que fue sometido en los tres últimos días en un hospital de la ciudad brasileña de Sao Paulo y en los que se descartó la reactivación del cáncer linfático que le fue diagnosticado y tratado el año pasado.
Lugo, que regresó a su país tras recibir el alta médica del Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo, dijo en breves declaraciones que concedió a periodistas a la salida del centro médico que se marchaba contento de Brasil, debido a que los médicos no habían encontrado rastros de cáncer.
"Is my new look (es mi nueva imagen)", bromeó el jefe de Estado en inglés al aludir a su cabeza rapada, que lució en el acto oficial.
Chávez, que lucía un traje negro con corbata roja y gafas, tomó juramento al ministro de Cultura, Pedro Calzadilla, a la de la Juventud, María del Pilar Hernández, así como al comandante de la brigada de la guardia de honor presidencial, Wilfredo Figueroa Chacín.
Sobre la caída del cabello, explicó que la quimioterapia "ataca con prioridad aquellas células del cuerpo que experimentan rápido crecimiento", entre las que citó el folículo capilar. "Eso indica que está funcionando el tratamiento", agregó.
El Mandatario venezolano había anticipado que se cortaría el cabello, después de que en la noche del domingo sintiera que se le cayó un "pedazo".
"Saldré Yul Brynner", había anunciado, en alusión al actor famoso por su cabeza pelada.
Chávez cuestionó las especulaciones de la oposición en torno a su enfermedad y descartó que padezca de cáncer en el colón, recto o la nariz, como, según dijo, han asegurado.
Insistió que no tiene células cancerígenas en su cuerpo y precisó que se sometió a la quiomioterapia para atacar la enfermedad.
Al acto de juramentación no asistió la recién designada ministra para Servicios Penitenciarios, Iris Varela, debido a un resfriado. "Te juramentaré cuando te pase la gripe", dijo Chávez, al dirigirse a la nueva funcionaria.
Chávez informó el 30 de junio al país de su cáncer y sigue un tratamiento que continuará en los próximos días con nuevos ciclos de quimioterapia.
El presidente paraguayo, Fernando Lugo, regresó a Asunción tras los exámenes a que fue sometido en los tres últimos días en un hospital de la ciudad brasileña de Sao Paulo y en los que se descartó la reactivación del cáncer linfático que le fue diagnosticado y tratado el año pasado.
Lugo, que regresó a su país tras recibir el alta médica del Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo, dijo en breves declaraciones que concedió a periodistas a la salida del centro médico que se marchaba contento de Brasil, debido a que los médicos no habían encontrado rastros de cáncer.