Con una inversión de $10 millones, la fábrica de cerámica cuencana Graiman, inauguró la Planta de regasificación y almacenamiento de gas natural. El cambio de la matriz energética de la empresa, responde a un proyecto único en el país, que busca no solo abaratar los costos de producción que permitan que la actividad sea rentable, sino que además se busca un desarrollo ecológico.
"Es un combustible amigable con el medio ambiente" expresó José Icaza, subsecretario de Desarrollo de Gas Natural, quien sostuvo además que la ubicación de la planta de la cual se extraerá el gas permite abaratar costos.
La plataforma de extracción de gas natural está ubicada en Bajo Alto, provincia de El Oro, desde donde se tiene previsto transportar diariamente de 20 a 30 toneladas de gas licuado, a la planta ubicada en Cuenca, aseguró Alfredo Peña, presidente del grupo Graiman.
Peña explicó además que el uso de gas licuado de petróleo, diésel y gas importado, no son factibles, pues no son aptos ni económica ni ecológicamente.
"La transformación de estos combustibles es importante, pues en el caso del gas importado, no tiene el precio adecuado que permita mantenerse a largo plazo", citó el empresario.
La planta de regasificación de la empresa Graiman tiene dos tanques de almacenamiento con una capacidad para guardar unos 200 metros cúbicos cada uno.
Ahí estará el gas natural licuado a menos de 160 grados centígrados.
El combustible en estado líquido pasará por una red de vaporizadores, en donde, producto de la disminución de la temperatura, pasará a estado gaseoso, convirtiéndolo así, en apto para el uso industrial.
"La planta de Graiman cuenta con todas la normas europeas de construcción, goza con sistema contra incendios y control vía web desde España", especificó Franco Zúñiga, director Corporativo del Grupo Graiman.
Actualmente 1 millón de BTUs de gas licuado de petróleo tiene un costo en el mercado de $16, mientras que el precio de la misma cantidad de gas natural es de aproximadamente $6.
A través de este proyecto, el Gobierno Nacional podrá ahorrar de $5 a $6 millones anuales, por el pago del subsidio de diésel.
El proyecto apoyado por el Gobierno, convierte a la empresa Graiman en pionera a nivel nacional en cambiar el uso de gas licuado de petróleo, a gas natural, permitiéndole a la fábrica de cerámicas ser más competitiva en otros mercados.
"Es un combustible amigable con el medio ambiente" expresó José Icaza, subsecretario de Desarrollo de Gas Natural, quien sostuvo además que la ubicación de la planta de la cual se extraerá el gas permite abaratar costos.
La plataforma de extracción de gas natural está ubicada en Bajo Alto, provincia de El Oro, desde donde se tiene previsto transportar diariamente de 20 a 30 toneladas de gas licuado, a la planta ubicada en Cuenca, aseguró Alfredo Peña, presidente del grupo Graiman.
Peña explicó además que el uso de gas licuado de petróleo, diésel y gas importado, no son factibles, pues no son aptos ni económica ni ecológicamente.
"La transformación de estos combustibles es importante, pues en el caso del gas importado, no tiene el precio adecuado que permita mantenerse a largo plazo", citó el empresario.
La planta de regasificación de la empresa Graiman tiene dos tanques de almacenamiento con una capacidad para guardar unos 200 metros cúbicos cada uno.
Ahí estará el gas natural licuado a menos de 160 grados centígrados.
El combustible en estado líquido pasará por una red de vaporizadores, en donde, producto de la disminución de la temperatura, pasará a estado gaseoso, convirtiéndolo así, en apto para el uso industrial.
"La planta de Graiman cuenta con todas la normas europeas de construcción, goza con sistema contra incendios y control vía web desde España", especificó Franco Zúñiga, director Corporativo del Grupo Graiman.
Actualmente 1 millón de BTUs de gas licuado de petróleo tiene un costo en el mercado de $16, mientras que el precio de la misma cantidad de gas natural es de aproximadamente $6.
A través de este proyecto, el Gobierno Nacional podrá ahorrar de $5 a $6 millones anuales, por el pago del subsidio de diésel.
El proyecto apoyado por el Gobierno, convierte a la empresa Graiman en pionera a nivel nacional en cambiar el uso de gas licuado de petróleo, a gas natural, permitiéndole a la fábrica de cerámicas ser más competitiva en otros mercados.
