El segundo periodo legislativo, que se iniciará en agosto con la designación de nuevas autoridades de la Asamblea Nacional, podría generar cambios a la Ley Orgánica de la Función Legislativa.
El proyecto reformatorio está en debate en la Comisión de Justicia y tanto para la oposición como para Alianza PAIS (AP), es clave en sus proyectos políticos futuros. Por eso tienen sus propias propuestas.
Entre otras disposiciones, se discuten nuevos procedimientos para la fiscalización, aumento del número de comisiones, la consulta prelegislativa y la conformación de la nueva escolta legislativa. En los dos primeros puntos no hay acuerdo.
La oposición busca que con las reformas a la fiscalización, sea el Pleno de la Asamblea, ya no la mesa, el que resuelva el archivo o continuación del juicio político contra funcionarios públicos y la conformación de nuevas comisiones.
Vicente Taiano, del Prian, señaló que el propósito es mejorar la tarea de la Asamblea en el campo de legislación y en especial en la fiscalización, para evitar el archivo de varios procesos interpelatorios de AP.
Insistió, además, en la creación de comisiones legislativas como la de Desarrollo Fronterizo y de los Migrantes, sectores que actualmente no tienen espacio en el órgano legislativo.
Para el oficialismo, la reforma en el campo de la fiscalización consistiría en permitir que los ministros asistan al Pleno a informar los requerimientos de algún legislador.
Mariángel Muñoz (AP) cree que el planteamiento de la oposición solo alargará los procesos de interpelación y nuevamente se retomarán escenarios de “escándalo político, sin sancionar a nadie, como en el pasado”.
A su juicio, aumentar el número de comisiones solo busca asegurar los votos de las bancadas no oficialistas en el Pleno para aprobar este proyecto.
La presidenta de la mesa de Justicia, María Paula Romo, aseguró que el proyecto de AP y el de los otros sectores ya fueron votados, pero ninguno logró los 6 votos necesarios.
Con el pasar de los días, al igual que otras leyes, este proyecto también podría vincularse con las elecciones legislativas, por lo que Romo no descartó que la votación se realice después del cambio de autoridades de la Asamblea.
“Al menos yo preferiría que si esta u otra ley se ve como un tema que se condiciona para la votación, no permitir ningún tipo de condicionamiento, ni de chantaje y se vota con las nuevas comisiones”, dijo Romo.
CAREI:
El proyecto reformatorio está en debate en la Comisión de Justicia y tanto para la oposición como para Alianza PAIS (AP), es clave en sus proyectos políticos futuros. Por eso tienen sus propias propuestas.
Entre otras disposiciones, se discuten nuevos procedimientos para la fiscalización, aumento del número de comisiones, la consulta prelegislativa y la conformación de la nueva escolta legislativa. En los dos primeros puntos no hay acuerdo.
La oposición busca que con las reformas a la fiscalización, sea el Pleno de la Asamblea, ya no la mesa, el que resuelva el archivo o continuación del juicio político contra funcionarios públicos y la conformación de nuevas comisiones.
Vicente Taiano, del Prian, señaló que el propósito es mejorar la tarea de la Asamblea en el campo de legislación y en especial en la fiscalización, para evitar el archivo de varios procesos interpelatorios de AP.
Insistió, además, en la creación de comisiones legislativas como la de Desarrollo Fronterizo y de los Migrantes, sectores que actualmente no tienen espacio en el órgano legislativo.
Para el oficialismo, la reforma en el campo de la fiscalización consistiría en permitir que los ministros asistan al Pleno a informar los requerimientos de algún legislador.
Mariángel Muñoz (AP) cree que el planteamiento de la oposición solo alargará los procesos de interpelación y nuevamente se retomarán escenarios de “escándalo político, sin sancionar a nadie, como en el pasado”.
A su juicio, aumentar el número de comisiones solo busca asegurar los votos de las bancadas no oficialistas en el Pleno para aprobar este proyecto.
La presidenta de la mesa de Justicia, María Paula Romo, aseguró que el proyecto de AP y el de los otros sectores ya fueron votados, pero ninguno logró los 6 votos necesarios.
Con el pasar de los días, al igual que otras leyes, este proyecto también podría vincularse con las elecciones legislativas, por lo que Romo no descartó que la votación se realice después del cambio de autoridades de la Asamblea.
“Al menos yo preferiría que si esta u otra ley se ve como un tema que se condiciona para la votación, no permitir ningún tipo de condicionamiento, ni de chantaje y se vota con las nuevas comisiones”, dijo Romo.
CAREI: