De contradictorio, neoliberal y antinacionalista fue calificada la propuesta del nuevo Bachillerato General Unificado (BGU), impulsado por el Ministerio de Educación (ME) el pasado jueves en un debate organizado por Contrato Social por la Educación (CSE), donde asistieron estudiantes, profesores y autoridades de algunas instituciones educativas, además del público en general.En cinco meses, los colegios de la capital, deberán aplicar la propuesta de BGU, que implica entre otras cosas, implementar una serie de asignaturas generales para todos los estudiantes del país con algunos elementos específicos del Bachillerato en Ciencias y Bachillerato Técnico, a partir de tercer año, 2011-2012.
De ahí que los panelistas plantearon su inconformidad de cómo se está llevando este programa nacional.
Una de ellas, Mariana Pallasco, presidenta de la Unión Nacional de Educadores (UNE), aseveró que la propuesta responde a intereses de las transnacionales y no está acorde a las necesidades de la realidad ecuatoriana. "No se habla de educación ambiental, de amor a la Patria, de los valores como la solidaridad", afirmó.
Además tachó de ser un proyecto adultocrático donde a los jóvenes no se los ha tomado en cuenta para la toma de decisiones y donde "los que mandan son los dueños del programa y los que obedecen son los maestros quienes deberán asumir en el aula el fracaso del proyecto".
En esta misma lógica planteó sus críticas Rosemarie Terán, docente de la Universidad Andina Simón Bolívar (UASB), quien afirmó que esta era una propuesta llena de contradicciones e incongruencias conceptuales que se presta fácilmente a la manipulación, pero sobre todo lo calificó de tener un trasfondo político, donde el debate académico ha sido nulo.
Habló, por ejemplo, de las destrezas con criterio de desempeño, que pretende aplicar el ME a las situaciones de la vida real, pero que para la docente, tiene una connotación política "porque viene en un paquete de términos como el desempeño, eficacia, calidad, emprendimiento que provienen del mundo empresarial que se las quiere trasladar a la educación pública", refirió.
Al respecto, Freddy Peñafiel, encargado de la propuesta del ME, dijo que no se pretende construir una figura técnica, sino que estas se adaptan al nuevo bachillerato, pero además, recoge otras áreas que responde a las necesidades actuales de los estudiantes.
"El ME no está dictando dogmas, como se quiere hacer ver, sino establecer parámetros básicos comunes para todos los estudiantes que tendrá un nivel de comprensión en el aula", añadió.
Así mismo señaló que la propuesta es perfectible, no perfecta, que aún se está construyendo y no está terminada.
