BABAHOYO. La entrega simbólica de palas y pequeños molinos para triturar hojas de maíz no satisfizo a los campesinos.
“Ni me pregunte cómo estamos porque lo de ayer (martes) fue una burla que nos hicieron; nos llaman para ir a retirar unas herramientas, alquilamos carro, vamos vestidos con nuestro uniforme de la asociación, llegamos a las 09:00 aguantando un solazo infernal y a pesar de que el ministro de Agricultura (encargado, Miguel Carvajal) llegó a las 10:00, recién a la una de la tarde se antojó dirigirse a nosotros. Y para qué; para nada, porque nada recibimos”. Es la expresión de Félix Álvarez, agricultor de Palenque.
Él sintetiza lo que ayer pensaban otros campesinos, parte de los 200 agricultores y ganaderos que se dieron cita el pasado martes en los bajos de la Gobernación de Los Ríos, donde el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap) anunció la entrega de herramientas y equipos, como parte de la ayuda por la emergencia agrícola vigente en seis provincias debido a la sequía.
En Los Ríos, estimativos del Magap y de los agricultores señalan que las pérdidas sumarían $ 100 millones. Los arroceros son los más afectados porque tienen pérdidas de un 70% de los sembríos.
Pero la llegada del ministro fue un desengaño para ellos. Ángel Gavilánez, dirigente de la Asociación de Pequeños Productores de Arroz de Babahoyo, Montalvo y Baba, manifestó en tono violento que nada de lo que dijo el ministro convenció porque ninguna de las necesidades fueron atendidas. “Ante nuestra exigencia nos ofreció recibirnos el lunes en la Subsecretaría de Guayaquil”.
Carvajal y autoridades locales llegaron a la tarima el martes, mientras la animadora repetía: “Si el país los llama a consulta, ustedes sí responden”.
El ministro citó la reanudación de los trabajos para la presa Baba y destacó que cambiaron los tiempos para los agricultores. Y anunció la entrega en comodato de cortadoras, molinos y guadañas que sirven para triturar los rastrojos del arroz, maíz para hacer alimento para el ganado. Pero en el evento solo se firmaron convenios e hicieron entregas simbólicas a cinco asociaciones.
“Ni me pregunte cómo estamos porque lo de ayer (martes) fue una burla que nos hicieron; nos llaman para ir a retirar unas herramientas, alquilamos carro, vamos vestidos con nuestro uniforme de la asociación, llegamos a las 09:00 aguantando un solazo infernal y a pesar de que el ministro de Agricultura (encargado, Miguel Carvajal) llegó a las 10:00, recién a la una de la tarde se antojó dirigirse a nosotros. Y para qué; para nada, porque nada recibimos”. Es la expresión de Félix Álvarez, agricultor de Palenque.
Él sintetiza lo que ayer pensaban otros campesinos, parte de los 200 agricultores y ganaderos que se dieron cita el pasado martes en los bajos de la Gobernación de Los Ríos, donde el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap) anunció la entrega de herramientas y equipos, como parte de la ayuda por la emergencia agrícola vigente en seis provincias debido a la sequía.
En Los Ríos, estimativos del Magap y de los agricultores señalan que las pérdidas sumarían $ 100 millones. Los arroceros son los más afectados porque tienen pérdidas de un 70% de los sembríos.
Pero la llegada del ministro fue un desengaño para ellos. Ángel Gavilánez, dirigente de la Asociación de Pequeños Productores de Arroz de Babahoyo, Montalvo y Baba, manifestó en tono violento que nada de lo que dijo el ministro convenció porque ninguna de las necesidades fueron atendidas. “Ante nuestra exigencia nos ofreció recibirnos el lunes en la Subsecretaría de Guayaquil”.
Carvajal y autoridades locales llegaron a la tarima el martes, mientras la animadora repetía: “Si el país los llama a consulta, ustedes sí responden”.
El ministro citó la reanudación de los trabajos para la presa Baba y destacó que cambiaron los tiempos para los agricultores. Y anunció la entrega en comodato de cortadoras, molinos y guadañas que sirven para triturar los rastrojos del arroz, maíz para hacer alimento para el ganado. Pero en el evento solo se firmaron convenios e hicieron entregas simbólicas a cinco asociaciones.