lunes, 5 de diciembre de 2011

Gobierno cuestiona a relatora para libertad de expresión de OEA

El gobierno cuestionó hoy la legitimidad de la relatora para la libertad de expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA, Catalina Botero, al señalar que tiene un nexo comercial con una ONG crítica del presidente Rafael Correa.

Hace “poco se descubre que la relatora Catalina Botero tiene una relación de sociedad con Fundamedios”, dijo el secretario (ministro) de Comunicación, Fernando Alvarado, a la radioemisora Sonorama.

“Ahí están los documentos (...), una relación comercial, asesoría, charlas”, agregó el funcionario, indicando que ello da lugar a un vínculo de “ asociación ” entre la relatora y el observatorio de medios, que denunció ante la CIDH un “ acoso ” del gobierno ecuatoriano contra la prensa.

Alvarado consideró que esa situación “le quita legitimidad a Catalina Botero para tratar el caso que llevó Fundamedios ” a la CIDH, de la OEA (Organización de Estados Americanos), en Washington, el pasado 25 de octubre.

Consultado por la AFP , el director de Fundamedios, César Ricaurte, negó el señalamiento y aseguró que “ es parte de una campaña que ha emprendido el gobierno ecuatoriano para tratar de desprestigiar a la CIDH y a su Relatoría”.

“Si se refiere a un taller que hizo la Relatoría en Ecuador no es ningún tipo de relación comercial, sino académica (...) para dar a conocer el sistema interamericano”, afirmó Ricaurte.

El activista hacía referencia a un seminario dictado el 8 de abril en Quito por dos miembros de la Relatoría, Michael Camilleri y Mauricio Herrera, según él mediante un contrato por 5.000 dólares suscrito entre Fundamedios y la secretaría general de la OEA.

“No hay ninguna relación de otro tipo. Es natural que suceda así, Fundamedios es la única ONG en Ecuador que está trabajando en la defensa y promoción de la libertad de expresión”, sostuvo Ricaurte, quien observó que la lista de donantes de la entidad, en la cual figura la OEA, está publicada en su sitio web.

Correa mantiene un enfrentamiento con un sector de la prensa ecuatoriana al que llama “poder fáctico, mediocre y corrupto”, y al que acusa de querer desestabilizarlo.

El 11 de noviembre, Correa acusó a la CIDH de abusar de sus funciones, luego de que el organismo pidiera al Estado ecuatoriano información sobre el juicio que resultó de una demanda del gobernante contra el diario El Universo.(El comercio)