El coronel César Carrión, exdirector del Hospital de la Policía, debe presentarse hoy en la Comandancia General de la institución y esperar las nuevas disposiciones laborales por parte de sus superiores, luego de permanecer casi siete meses detenido acusado de complicidad en el intento de magnicidio al presidente Rafael Correa.“Se trata de un proceso administrativo normal, deberá presentarse ante su jefe inmediato tal como lo hace cualquier funcionario cuando retorna a sus actividades luego de una ausencia”, explicó William Orbe, cuñado del oficial, que ha cumplido el papel de vocero familiar en el caso.
El coronel Carrión –a su salida del penal García Moreno la tarde del pasado sábado– dijo que no emitirá ningún tipo de declaración en público ya que se encuentra en servicio activo. Así busca evitar toda confrontación o impasse que pueda perjudicar su situación al interior de la policía en donde lo espera un expediente administrativo por la revuelta policial del 30 de septiembre pasado.
Antes de ser apresado el oficial fue transferido del Hospital a la Dirección Nacional de Migración. Se desconoce si será ratificado en el cargo o trasladado a otra dependencia. Su esposa, Janeth Orbe, tiene la esperanza de que mantenga el trabajo en Quito.
Familiares reconocieron que es el momento de mantener cautela ya que la lucha legal no termina y que la libertad del coronel debe defenderse. Reconocieron que uno de los primeros pedidos de Carrión a la Comandancia General será un permiso para someterse a un chequeo médico completo en el Hospital de la Policía que él dirigió.
César Carrión apenas tuvo un día de descanso. Acudió este domingo con su familia a un servicio religioso en el centro de Quito y luego mantuvo un almuerzo íntimo con la familia. Su hermana, Rosa, aseguró que todos estaban exhaustos hasta los huesos y que fue una reunión de fortaleza y unión.
El ministro del Interior, José Serrano, quien aseguró el inicio de acciones legales contra los jueces Hugo Sierra, Luis Fernández y Jaqueline Pachacama, del Tribunal Quinto de Garantías Penales de Pichincha, si declaraban inocente al exdirector del hospital policial, no emitió ninguna instrucción especial sobre el reingreso del oficial a sus labores.
Trascendió que el ministro esperaba ser notificado oficialmente sobre las decisiones de los jueces; solo entonces delineará un plan de acción contra los magistrados que también otorgaron la libertad a los policías Luis Bahamonde, Jaime Vinicio Paucar y Luis Martínez, este último no será liberado por mantener otro proceso activo en su contra.
