Desde hoy, el Instituto Ecuatoriano de Propiedad Intelectual (IEPI) analizará si el pedido de registro de marcas de los términos "30S", "30-S" y "Prohibido olvidar", presentado por el Gobierno, tiene solicitudes de oposición, anterioridad (que ya exista como marca o haya una solicitud anterior) o que existan causales que puedan impedir su registro.
Así explicó el director el titular del IEPI, Andrés Icaza, quien indicó además que la entidad recibe unas 1 600 solicitudes de registro de marca mensuales.
Agustín Saguier, director general de Propiedad Intelectual del Paraguay, comentó que en su país existen varias marcas cuyo registro ha sido solicitado por el Gobierno y que eso no implica que la ciudadanía no las pueda seguir usando.
Aclaró que, cuando se registran fechas o este tipo de expresiones, pasan a ser registros con protección más débil, porque no se puede impedir que la gente los escriba o mencione.
Por su parte, Eduardo Arcos, el bloguero guayaquileño que vive en España y que fue quien sugirió que se utilizara #30S en la red social Twitter, el día de la revuelta policial, dijo que su propuesta se basó en la confusión al comunicar la información referente a lo que pasaba; de inmediato, la ciudadanía y el Gobierno la adoptaron, por lo que considera que así debe mantenerse.
Destacó que el registro de la marca sienta un precedente peligroso, en el que, si se hace una opinión o se crea un movimiento usando esas siglas, haya más peso legal para ir en contra de ello.
Puntualizó que no ha presentado oposición al IEPI, pues "estar fuera del país complica bastante el proceso". "He intentado por varias vías iniciar el proceso y estoy en contacto con abogados intentando decidir el mejor curso de acción", concluyó.
Otra objeción fue presentada ayer por el asambleísta Andrés Páez. El legislador alude que la autoría y propiedad intelectual de la expresión "Prohibido olvidar" corresponde al cantautor panameño Rubén Blades y que por lo tanto es de propiedad ajena, que no puede ser objeto de apropiación por parte del Gobierno ya que violaría el art. 5 de la Ley de Propiedad Intelectual.
En cuanto a "30S", Páez sostiene que la petición es insólita puesto que equivale a que en España se pretenda registrar la denominación "11M", que alude a la masacre terrorista del 11 de marzo de 2004; o que en los EEUU registren "9-11" en relación a los atentados del 11 de septiembre de 2001.
Así explicó el director el titular del IEPI, Andrés Icaza, quien indicó además que la entidad recibe unas 1 600 solicitudes de registro de marca mensuales.
Agustín Saguier, director general de Propiedad Intelectual del Paraguay, comentó que en su país existen varias marcas cuyo registro ha sido solicitado por el Gobierno y que eso no implica que la ciudadanía no las pueda seguir usando.
Aclaró que, cuando se registran fechas o este tipo de expresiones, pasan a ser registros con protección más débil, porque no se puede impedir que la gente los escriba o mencione.
Por su parte, Eduardo Arcos, el bloguero guayaquileño que vive en España y que fue quien sugirió que se utilizara #30S en la red social Twitter, el día de la revuelta policial, dijo que su propuesta se basó en la confusión al comunicar la información referente a lo que pasaba; de inmediato, la ciudadanía y el Gobierno la adoptaron, por lo que considera que así debe mantenerse.
Destacó que el registro de la marca sienta un precedente peligroso, en el que, si se hace una opinión o se crea un movimiento usando esas siglas, haya más peso legal para ir en contra de ello.
Puntualizó que no ha presentado oposición al IEPI, pues "estar fuera del país complica bastante el proceso". "He intentado por varias vías iniciar el proceso y estoy en contacto con abogados intentando decidir el mejor curso de acción", concluyó.
Otra objeción fue presentada ayer por el asambleísta Andrés Páez. El legislador alude que la autoría y propiedad intelectual de la expresión "Prohibido olvidar" corresponde al cantautor panameño Rubén Blades y que por lo tanto es de propiedad ajena, que no puede ser objeto de apropiación por parte del Gobierno ya que violaría el art. 5 de la Ley de Propiedad Intelectual.
En cuanto a "30S", Páez sostiene que la petición es insólita puesto que equivale a que en España se pretenda registrar la denominación "11M", que alude a la masacre terrorista del 11 de marzo de 2004; o que en los EEUU registren "9-11" en relación a los atentados del 11 de septiembre de 2001.