La Universidad Central del Ecuador sigue siendo un reducto para miembros del Grupo de Combatientes Populares (GCP). Así lo pudo comprobar un equipo de la Agencia Andes mientras realizaba una cobertura en ese reducto universitario.
Con cerca de 50 mil estudiantes, la Universidad Central del Ecuador es un referente de la educación en el país. Sin embargo, en sus aulas y patios hubo grupos que aprovecharon esta infraestructura para sembrar el terror político.
En medio de una investigación sobre el GCP en el recinto, reportero, camarógrafo y fotógrafo de esta agencia fueron amenazados por un individuo al que los estudiantes reconocieron como militante del Frente Revolucionario de Izquierda Universitario (FRIU).
El hecho sucedió en el patio que une a las facultades de Jurisprudencia con la de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación. Más tarde, y acompañado de otros de sus “compañeros”, el individuo rondaba en torno al equipo periodístico en actitud amenazante.
Prácticas como esta no resultan novedosas en esta parte de la institución, otrora un bastión de los movimientos autodenominados como “izquierda revolucionaria”. Eso, por lo menos, es lo que sostiene el vicepresidente de la Asociación Escuela de Jurisprudencia, Edison Revelo.
El dirigente estudiantil comentó que en ciertas facultades todavía opera este tipo de movimiento. Según él, el GCP viene trabajando como un ala del Movimiento Popular Democrático (MPD) y el FRIU dentro de la universidad.
Sentado en la oficina que por vía de las urnas le arrebataron al FRIU, el estudiante de quinto año de Jurisprudencia y miembro del movimiento Nueva Universidad aseguró que la gente se amedrenta ante la presencia de esta gente, cuyo modus operandi empieza desde que los muchachos están en secundaria.
De acuerdo a las versiones recogidas entre estudiantes que pidieron no ser identificados, la Federación de Estudiantes Secundarios del Ecuador (FESE) infiltra gente en los colegios, selecciona “cuadros” y después los llevan para que militen en el GCP, donde reciben preparación política y militar.
La estructura que articula todas estas organizaciones en el país es el Partido Comunista Marxista Leninista del Ecuador (PCMLE). Para mostrar este vínculo, en las actas de su congreso extraordinario del 2000, el PCMLE planteó: “las acciones de nuestro Partido, de la Juventud Revolucionaria, del MPD, del Frente Popular y otras organizaciones, dirigidas a empujar la lucha de los trabajadores y los pueblos por sus más sentidas aspiraciones y por el cambio social, son calificadas como «atentatorias a la democracia», como «incitación al caos y la anarquía». Se busca vincular a estas organizaciones con las fuerzas insurgentes de Colombia, o como si patrocinaran acciones terroristas, provocadas por agentes de la misma burguesía…”
Sin embargo, en su declaración de principios este partido plantea que “la vía para la conquista del poder es la acción insurreccional armada de la clase obrera y los pueblos” y que “la primera tarea de la revolución es derrocar el viejo poder político opresor, reaccionario, del imperialismo y de la burguesía y reemplazarlo por el Poder Popular, por un poder totalmente nuevo”.
