La actividad del volcán Tungurahua, en el centro andino de Ecuador, aumentó en las últimas horas con explosiones, emisión de ceniza y un posible flujo piroclástico, según informó ayer el Instituto Geofísico (IG).
Según el reporte, se registraron desde la noche del sábado cuatro explosiones de tamaño "moderado a grande", una de las cuales generó una "columna de emisión cargada de ceniza de aproximadamente 4 km de altura".
Otro de esos fenómenos produjo un cañonazo que ocasionó vibración del suelo y ventanales en algunos sectores aledaños.
Un vigía del poblado de Cusúa dio cuenta de un depósito caliente en la parte alta de esa zona, que se presume que es producto de un pequeño flujo piroclástico (mezcla de gases, ceniza y fragmentos de roca con temperatura de hasta 800 grados centígrados), señaló el IG en su página de Internet.
Debido a la nubosidad en el sector "no se ha logrado realizar observaciones directas, ni con la ayuda de los sensores térmicos, para determinar la presencia de depósitos a altas temperaturas en los flancos y expulsión de material incandescente desde la zona del cráter". Las autoridades no han determinado un aumento del nivel de alerta para las poblaciones cercanas.
El pasado 28 de noviembre, la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) declaró la alerta naranja (previa a la roja de máxima peligrosidad) para esas zonas ante un aumento "súbito" del proceso eruptivo. Tres semanas después, la entidad bajó el nivel de alerta a amarillo.
El Tungurahua ("garganta de fuego", en quichua), de 5 029 metros y 135 km al sur de Quito, se mantiene en erupción desde 1999 y alcanzó su mayor pico en