El decreto del estado de excepción y ley seca a nivel nacional movilizó a los Comités de Operaciones de Emergencia de todas las provincias, para organizar operativos de control por la venta de licor y planes de atención médica en los casos de pacientes intoxicados, tras la muerte de 24 personas en el país.
Entre la tarde del domingo y la mañana de ayer, diez negocios ubicados en Pascuales, Suburbio Oeste y Guasmo fueron inspeccionados, en los que decomisaron 240 litros de licor. Ocho personas fueron detenidas en la provincia.
La subsecretaria de Salud, Fátima Franco, indicó que están disponibles los servicios de hemodiálisis de los hospitales de Guayas, para tratar a los afectados por el envenenamiento con licor adulterado.
En Guayaquil están internados 27 pacientes que fueron derivados de Los Ríos. En la parroquia Ricaurte, de Los Ríos, el hospital móvil atendió hasta el mediodía de ayer a 56 afectados. En esta provincia fueron decomisados cerca de 4.000 litros de aguardiente en los cantones Puebloviejo, Babahoyo, Baba, Urdaneta, Quevedo y Quinsaloma.
Los operativos continúan para ubicar a los vendedores, entre ellos Wilfrido Vera Bustamante, principal distribuidor de aguardiente en cuatro cantones. También recomendaron que los compradores no consuman el licor de Vera Bustamante. En el destacamento de Ventanas está detenido Néstor Jiménez Contreras.
En Quevedo, el comisario Víctor Vázquez detuvo a 11 personas por no respetar la ley seca y decomisó 36 galones de licor y 36 botellas con ese producto, en dos establecimientos.
Cincuenta litros de licor fueron decomisados entre la noche del domingo y la mañana de ayer en Ambato. También fue clausurado un local clandestino y una persona fue sancionada por vender alcohol sin permiso.
Las autoridades de Santo Domingo de los Tsáchilas rodearon los negocios en la parroquia San José de Alluriquín donde recogieron muestras del licor artesanal. No hubo detenidos porque los comerciantes colaboraron con la Policía.
Siete brigadas conformadas en Santa Elena, por orden de la gobernadora Noralma Zambrano, decomisaron tanques, pomas y fundas con licor sin registro sanitario. Tres personas fueron detenidas en el mercado de La Libertad por la venta de la bebida e impedir el decomiso.
En las parroquias Anconcito, José Luis Tamayo, Santa Rosa, del cantón Salinas fueron detenidas varias personas por no respetar la ley seca.
En Azuay, Manabí, El Oro y Esmeraldas se intensificaron los operativos para controlar la venta y consumo de alcohol.
La gobernadora de Manabí, Susana Dueñas, dispuso controles exhaustivos en Junín, Santa Ana, Calceta, Chone y varias parroquias en las que procesan aguardiente. En estas provincias las autoridades coordinaron los operativos desde la mañana de ayer.
Entre la tarde del domingo y la mañana de ayer, diez negocios ubicados en Pascuales, Suburbio Oeste y Guasmo fueron inspeccionados, en los que decomisaron 240 litros de licor. Ocho personas fueron detenidas en la provincia.
La subsecretaria de Salud, Fátima Franco, indicó que están disponibles los servicios de hemodiálisis de los hospitales de Guayas, para tratar a los afectados por el envenenamiento con licor adulterado.
En Guayaquil están internados 27 pacientes que fueron derivados de Los Ríos. En la parroquia Ricaurte, de Los Ríos, el hospital móvil atendió hasta el mediodía de ayer a 56 afectados. En esta provincia fueron decomisados cerca de 4.000 litros de aguardiente en los cantones Puebloviejo, Babahoyo, Baba, Urdaneta, Quevedo y Quinsaloma.
Los operativos continúan para ubicar a los vendedores, entre ellos Wilfrido Vera Bustamante, principal distribuidor de aguardiente en cuatro cantones. También recomendaron que los compradores no consuman el licor de Vera Bustamante. En el destacamento de Ventanas está detenido Néstor Jiménez Contreras.
En Quevedo, el comisario Víctor Vázquez detuvo a 11 personas por no respetar la ley seca y decomisó 36 galones de licor y 36 botellas con ese producto, en dos establecimientos.
Cincuenta litros de licor fueron decomisados entre la noche del domingo y la mañana de ayer en Ambato. También fue clausurado un local clandestino y una persona fue sancionada por vender alcohol sin permiso.
Las autoridades de Santo Domingo de los Tsáchilas rodearon los negocios en la parroquia San José de Alluriquín donde recogieron muestras del licor artesanal. No hubo detenidos porque los comerciantes colaboraron con la Policía.
Siete brigadas conformadas en Santa Elena, por orden de la gobernadora Noralma Zambrano, decomisaron tanques, pomas y fundas con licor sin registro sanitario. Tres personas fueron detenidas en el mercado de La Libertad por la venta de la bebida e impedir el decomiso.
En las parroquias Anconcito, José Luis Tamayo, Santa Rosa, del cantón Salinas fueron detenidas varias personas por no respetar la ley seca.
En Azuay, Manabí, El Oro y Esmeraldas se intensificaron los operativos para controlar la venta y consumo de alcohol.
La gobernadora de Manabí, Susana Dueñas, dispuso controles exhaustivos en Junín, Santa Ana, Calceta, Chone y varias parroquias en las que procesan aguardiente. En estas provincias las autoridades coordinaron los operativos desde la mañana de ayer.